Dejan puente en promesas

AutorAlejandro Alvarado

"Desaparecieron nuestra historia", expresa Lupita Lara, la última persona que dejó su natal pueblo de Arcediano.

El silencio se apropia de este pueblo, sólo se escuchan graznidos y el ruido del Río Santiago que luce sin peces; a un lado aún se encuentra la escuela, aunque en vez de libros hay botellas de vino; donde había casas, hay tierra suelta, y del Puente de Arcediano que dio identidad al pueblo, sólo restan cables oxidados y cimientos que no se terminaron de construir para reubicarlo.

Hace más de tres años, para la construcción de la Presa de Arcediano, el Gobierno del Estado desmontó el primer puente colgante del País con el compromiso de que lo reconstruiría a 800 metros de su sitio original: a cuatro años de distancia aún no se levanta, la obra está parada y se prohíbe el paso a civiles.

"Se ve grandísimo el lugar que ocupó el puente, eran casi 300 tablas las que tenía para que pasaras sobre ellas, ahora vas y ves la distancia tan grande y ahora ¿qué sientes? Sientes como algo dentro, ver aquello que tú tenías y no valorabas y hasta que se acabó, ves la riqueza que teníamos tan grande, su historia", dice Lara, con sus dedos entrelazados.

Ignacio Gómez Arriola, perito del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) designado para dar seguimiento a la reubicación del puente histórico, recordó que la entonces Comisión Estatal del Agua (CEA) firmó un convenio en el que se comprometía a que, al desmontar, reconstruiría inmediatamente la estructura.

"Firmado el convenio, nosotros de alguna manera nos sentimos un poco, no diría que engañados, pero no se cumplió el convenio que permitió el desmantelamiento, es decir, las condiciones en las que estaba establecido el convenio no se cumplieron por parte del Gobierno del Estado representado por la Comisión", dijo Gómez Arriola.

MURAL recorrió lo que quedó del pueblo de Arcediano, ahora ocupado por elementos de seguridad privada. De vez en cuando pasan dueños de huertas para regar los árboles de mango: en su trayecto hay viejos cables, ya oxidados, de aquel puente que permitía el tránsito entre Zacatecas y Guadalajara.

"Lamentablemente las piezas originales, piedras, herrajes, la estructura metálica, está en una situación de indefinición, está guardada, pero habrá que ver en qué condiciones y si verdaderamente está resguardada, son temas que tienen que ver con el patrimonio de los jaliscienses y también con los compromisos del propio Gobierno", dice Arriola.

El perito afirma que el...

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