Definen estereotipos identidad extranjera
| Autor | Julieta Riveroll |
Los extranjeros se distinguen a simple vista, "ora sí que por su color", ya que suelen ser güeritos, y por su idioma, pues casi siempre hablan inglés, según la estereotipada visión que comparte el personal de seguridad encargado de registrar la entrada de los turistas nacionales e internacionales en ocho museos de la Ciudad de México.
Una visita a los museos de Antropología, Bellas Artes, San Ildefonso, San Carlos, Templo Mayor, Rufino Tamayo, de Arte Moderno y Museo Mural Diego Rivera permitió determinar que, además de la apariencia física y el acento, al extranjero también se le identifica por su vestimenta casual y por las mochilas y cámaras fotográficas que carga, de ahí que custodios como Lorena Vázquez, Daniel García, Miguel Angel Méndez y Miguel Aguilar González pasen horas adivinando la procedencia del público asistente y pocas veces averigüen su lugar de origen.
En caso de que algún mexicano comparta ese patrón, es probable que terminen adjudicándole otra nacionalidad al ingresar a los recintos, tal como REFORMA pudo comprobar ayer, pues la "percha" de tres jóvenes chilangos bastó para que el personal del Museo Nacional de Antropología los considerara extranjeros.
A los custodios se les enseña a diferenciar ambos grupos de visitantes con base en estereotipos étnicos como los ojos rasgados o azules, la tez oscura y los cabellos crespos de los africanos, admitió Felipe Solís, director del recinto.
Según el funcionario, falta rigor en las cifras debido a que no se realizan encuestas para determinar el origen de los asistentes. Estas no pueden hacerse, dijo, porque se prolongaría el ingreso de los visitantes, que en el 2002 sumaron casi un millón 300 mil.
"Ni en el Louvre de París ni en el Metropolitano de Nueva York se hacen estudios para conocer el lugar de procedencia del público, no es privativo de los museos en México. Se trata de dar una visión aproximada, porque detener mayor tiempo a la gente implicaría protestas. Por razones prácticas, se ha optado por recurrir a los estereotipos", dijo Solís.
El sociólogo y antropólogo Roger Bartra calificó de burdo el método para diferenciar a ambos grupos de visitantes, tomando en cuenta que sus colegas "algo podrían saber" de las modernas técnicas de investigación en lugar de optar por una estadística mal hecha.
La opción sería elaborar una muestra representativa de los asistentes a lo largo del día y en diferentes meses, dijo, ante lo absurdo que resulta encasillar a las personas en...
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