David Shields / ¿Reforma óptima?

AutorDavid Shields

Ya conocemos posiciones, de izquierda y neoliberales, moderadas y radicales sobre la Reforma Energética. Se escuchan diversas voces y opiniones en medios y en foros. Sólo falta la propuesta del Presidente Peña Nieto. En lo personal, veo diagnósticos que subestiman varios factores, por lo que aquí expongo brevemente algunas consideraciones claves que, según mi percepción, deben tenerse muy en cuenta en el análisis de los dos temas fundamentales: (1) la situación de Pemex y (2) la entrada de capital privado a la industria petrolera.

En mi opinión, la situación actual, operativa y administrativa, de Pemex está peor de lo que muchos analistas, de izquierda y derecha, suponen. Se subestiman, a mi juicio, tremendas debilidades que son atribuibles a la burocracia, a la sobrerregulación, a la intervención política, a su condición de paraestatalidad, a la falta de una mística empresarial y a los consejos de administración opacos e ineficaces, rodeados por comités disfuncionales. Habría que atender esos aspectos como máximas prioridades.

Veo un Pemex vulnerable por esos factores -no sólo en lo fiscal y lo laboral- y en riesgo de colapso en pocos años. Hay un deterioro gradual en casi todos los indicadores operativos. Evaluaciones internas indican que los yacimientos más pródigos del País Ku-Maloob-Zaap pronto iniciarán su declinación -como ya ocurrió en Cantarell-, por lo que es probable una nueva caída de la producción petrolera. Fracasó la última ronda de contratos incentivados, en Chicontepec. Hay casos de desorden presupuestal, sobre todo en la Región Norte.

Pemex Refinación demuestra una incapacidad casi total para sacar adelante nuevos proyectos industriales. Muchos no salen a concurso, otros llevan años de retraso. Se padece una normatividad agobiante que obstaculiza la contratación y la gestión eficiente de los proyectos, causando parálisis en la toma de decisiones. La nueva refinería Bicentenario está detenida, quizás ya cancelada, por razones de economía y logística, y no hay transparencia al respecto.

Ante problemas crecientes, la Reforma debería simplificar normas, procesos y estructuras, agilizar proyectos y rescatar a Pemex del deterioro que sufre. También es factible que los...

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