David Letterman y su atracción fatal

AutorSandra Rodríguez

David Letterman, comediante y conductor del Late Show With David Letterman, es un imán para gente extraña.

Una de estas personas es Robert "Joe" Halderman, presunto extorsionador que trató de sacarle 2 millones de dólares. Inicialmente sostenía su inocencia, pero el 9 de marzo por fin reconoció su culpabilidad.

Halderman sabía que Letterman tenía amoríos con las colaboradoras de su programa. En septiembre del año pasado, amenazó con escribir un guión o libro sobre el caso si no recibía este dinero.

Letterman, de casi 63 años, contactó a las autoridades, quienes le pidieron pagarle con un cheque falso y rastreable. Halderman fue arrestado al intentar cobrarlo.

Lo más raro es que este señor no era cualquier criminal, sino un periodista respetado con tres décadas de experiencia.

Además, tenía fama de humanitario y dirigió un documental nominado al Emmy, Beslan: Three Days in September (2006), sobre las tragedias en una ciudad rusa ocupada por invasores.

En mayo comenzará su sentencia de seis meses de cárcel, luego de los cuales estará cinco años bajo libertad provisional. Además, deberá completar mil horas de trabajo comunitario.

Y no es la única persona que ha tenido enfrentamientos con la ley por importunar a Letterman.

LA ESTRELLA Y EL ASTRONAUTA

Una mujer con esquizofrenia llamada Margaret Mary Ray estuvo casada y tuvo cinco niños, pero cuando su matrimonio se desintegró, se obsesionó con Letterman.

En 1988 se robó su Porsche. Cuando la detuvieron, dijo ser la esposa de David.

En los años siguientes, la arrestaron ocho veces por allanamiento de morada. Una vez hasta se la encontraron dormida en la cancha de tenis del conductor. Finalmente, la encerraron por 10 meses.

Cuando la dejaron libre, comenzó a acosar a Story Musgrave, un astronauta jubilado.

En 1994, simuló ser reportera para acercársele en el Johnson Space Center de Houston. Más adelante se presentó en su casa y gritaba a los cuatro vientos que eran íntimos amigos y que estaban escribiendo un libro juntos.

La volvieron a encarcelar, pero salió en 1998.

Triste porque ni Letterman ni Musgrave la quisieron, se suicidó. La mujer se arrodilló en las vías de un tren para...

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