David Faitelson / Juzgar y matar...

Juzgar, calificar, reputar. Las redes sociales lo han llevado a un grado superlativo. Siempre, en nuestra sociedad y en cualesquiera que hayan sido los tiempos, se juzgaba, se interpretaba, se definía. La diferencia es que, en la de hoy, en esta sociedad, hay prisa para "juzgar" y también para "aniquilar".

La polémica se centró en las últimas horas sobre un tenista. No un tenista más, el mejor del mundo -hoy- y quizá el mejor de todos los tiempos -mañana-. La historia puede resumirse así: Novak Djokovic no quiere vacunarse. Recibe una invitación y una exención médica de los organizadores del Abierto de Australia. Viaja en un vuelo comercial desde Dubai a Melbourne, y ahí, las autoridades australianas lo detienen y deciden que su visado -o la exención- no eran válidos. Se queda resguardado en un hotel cercano al aeropuerto. Luego, un juez decide dejarlo libre y valerle la visa. Djokovic se prepara para jugar. Ya tiene rival para el lunes. Entrena sobre la mítica superficie de la Rod Laver Arena. Horas más tarde, el gobierno australiano continúa con su persecución. Se asegura que el tenista serbio mintió en su declaración de ingreso al país. El ministro de exteriores reacciona y el gobierno de Morrison ordena su deportación. Djokovic es escoltado en un auto oficial junto a un policía de inmigración para que abandone el país.

Lo más fácil y también el camino más ignorante es señalar que Djokovic es el problema porque no se quiere vacunar. No estamos, creo yo, en tiempos donde ninguna autoridad, gobierno o mandato pueda imponernos qué hacer y qué no hacer con nuestro cuerpo. En ese sentido, Djokovic está en su derecho. Lo que no parece estar en su lugar es la postura australiana, desde su federación y hasta su autoridad migratoria. ¿Por qué primero sí había una exención para Djokovic? ¿Por qué después no? ¿Por qué le dejaron subir a un avión en Dubai si no tenía la visa para ingresar a Australia? ¿Por qué Australia no definió desde mucho antes su postura con Djokovic cuando sabía que él no estaba vacunado? ¿Por qué fue tratado como un delincuente? ¿Por qué fue utilizado como una bandera política hacia el mundo con un mensaje sobre la necesidad de que todos estemos...

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