Cumple su huella siete décadas

AutorLuis López

En la historia predominan las voces de los líderes sociales, pero de vez en cuando surge la voz de una persona común por el simple hecho de escribir su propio relato.

A 70 años de la muerte de Ana Frank, en marzo de 1945, su diario, que realizó durante parte de la Segunda Guerra Mundial, inmortaliza el testimonio de una de las más de 60 millones de víctimas del conflicto bélico.

Ana, voz única de su época

Ana empezó a escribir su diario el 12 de junio de 1942, el día que cumplió 13 años. El 6 de julio de ese año, ella y su familia se escondieron de los nazis en Amsterdam con otros cuatro judíos refugiados.

Un mes después de la última entrada del diario escrita el 1 de agosto de 1944, Ana y su familia fueron enviados al campo de concentración de Auschwitz, para luego ser desplazados a Bergen-Belsen, donde Ana murió de tifus.

La fecha exacta de su muerte se desconoce, pero se conmemora el 12 de marzo. Fuerzas del ejército británico liberaron el campo de concentración Bergen-Belsen el 15 de abril de 1945, semanas después de la muerte de la joven.

La historia de la judía alemana, quien falleció a los 15 años, es valiosa por ser una fuente primaria, escrita durante el conflicto, que demuestra las vivencias de una joven en ese contexto, señala la historiadora Ana Portnoy.

"Hay muchos testimonios de niños que fueron salvados y que luego fueron entrevistados ya como adultos", comparte, "pero cuando escriben sus testimonios ya son adultos. Aquí está escribiendo en cuanto van sucediendo los hechos".

Otto Frank, padre de Ana y único familiar de ella que sobrevivió el Holocausto, publicó el diario, cuya primera edición salió en 1947 con el título Las habitaciones de atrás.

En la actualidad el diario, leído en el mundo entero por jóvenes de secundaria y prepa en cursos de literatura e historia, ha vendido más de 300 millones de copias y se ha traducido a más de 60 idiomas.

Hoy en día la casa donde la joven estuvo refugiada en la capital holandesa alberga la Casa Museo de Ana Frank, dedicada a difundir su historia, así como un centro educativo que desarrolla programas que promueven la tolerancia.

Una reflexión sobre la tolerancia

Están por cumplirse siete décadas del fin de la Segunda Guerra Mundial y aún es lamentable que existan actitudes y conductas de intolerancia étnica, racial y religiosa, señala la catedrática Ana Portnoy.

El incremento de ataques hacia judíos, musulmanes, minorías étnicas y migrantes en Europa demuestra que aún existen prejuicios...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR