Todos cuentan
| Autor | Alina Midori Hernández |
Madres solteras, abuelitos, profesionistas, indigentes, recién nacidos, familias numerosas... todos quienes habiten en Jalisco, incluyendo artículos como celulares y televisiones, contarán en el Censo 2010, que arranca el 31 de mayo.
Con el fin de incluir a toda la población del Estado y el País, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), planeará operativos especiales para identificar y recabar información de quienes vivan en zonas de difícil acceso o no tengan una vivienda estable.
Habrá brigadas que visitarán orfanatos, asilos, conventos, cárceles, cuarteles militares, hospitales siquiátricos y hasta contacten gente que radica en el extranjero.
Desde el último día de mayo hasta el 25 de junio, se hará el levantamiento del Censo de Población y Vivienda 2010 en Jalisco y en todo México, cuyo propósito es actualizar la información sobre el número de habitantes, características socioeconómicas y distribución territorial, además de recopilar datos sobre las condiciones de las viviendas.
Las personas que pueden responder el cuestionario son los jefes del hogar, su cónyuge o una persona mayor de 15 años que conozca los datos de los habitantes, indicó Armando Flores Ocampo, director de Servicios de Información de la región Occidente del INEGI.
Los datos proporcionados por el informante serán completamente confidenciales, pues el Artículo 38 de la Ley del Sistema Nacional de Información Estadística y Geográfica así lo establece.
En la información presentada por el INEGI sólo se pueden dar números, nunca nombres de personas ni de empresas, es por eso que no se piden apellidos de los encuestados.
La veracidad del censo estará depositada en la declaración del informante, la cual será tomada como información verídica, pues el trabajo del entrevistador será únicamente la obtención de datos para el cuestionario.
"Lo que él declare es lo que será para nos la verdad", aseguró Gloria Feria Acquart, subdirectora de Difusión del instituto.
Para censar a la población, se aplicarán dos cuestionarios en entrevista directa y para evitar que los encuestadores, que se eligen a través de una convocatoria, alteren los datos habrá un equipo de validadores y verificadores que realizarán muestreos aleatorios en las casas visitadas.
Estos encargados trabajarán durante las dos semanas posteriores al censo y si al revisar el trabajo de los encuestadores encuentran alguna irregularidad en los cuestionarios aplicados, éstos se harán de nuevo.
Al ser un censo...
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