Cuéntame una historia
| Autor | Édgar Contreras |
Un jugador que fue campeón de la Euro mientras veía morir a su pequeña hija, un finalista gracias a un volado, un futbolista casi desconocido que se volvió inmortal al inventar el penal más ingenioso de la historia, un héroe que aprendió a jugar futbol en un internado debido a la pobreza, esos y otros relatos le dan vida a las Finales de la competencia más importante a nivel de Selecciones en Europa, y que CANCHA recopila de cara a la decimosexta edición.
Twitter: @ContrerasCANCHA
EURO 1960
SAN LUNES
Viktor Ponedelnik marcó en la prórroga el 2-1 sobre Yugoslavia en la Final de la Euro 1960, celebrada en Francia. A los 4 años huyó de su natal Rostov del Don, debido a la Segunda Guerra Mundial. "Quemaban todos los lugares; mucha gente falleció. Conseguimos coger el último tren para salir de allí", dijo a la UEFA. Comenzó su carrera en un club de Cuarta División, de una fábrica de cosechadoras. Los moscovitas vieron el inicio del partido por el título a las 10:00 p. m., del domingo y el final del mismo ya en lunes. Llama la atención que, en ruso, "ponedelnik" significa "lunes".
1 EUROCOPA ganó la URSS (1960), pese a que llegó a 4 Finales.
EURO 1964
PIEDRAS Y PIÑAS
El dictador Francisco Franco no se salió con la suya, ya que no quería que el anfitrión España jugara la Final de la Eurocopa 1964 contra la URSS, debido a las diferencias de regímenes. El cuadro español se impuso 2-1 y conquistó su primer título, en gran medida por el despliegue táctico promovido por su entrenador José Villalonga, quien antes del juego dibujó un campo sobre la arena y utilizó piedras para representar a sus jugadores y piñas para los soviéticos. "Las piedras son más fuertes", les aclaró, y así ocurrió en el Estadio Santiago Bernabéu.
6 MINUTOS tardó Jesús María Pereda en meter el gol más rápido en Finales de la Euro.
EURO 1968
LA MONEDA DE LA SUERTE
El capitán italiano Giacinto Facchetti, defensa del Inter de Milán, fue el hombre más decisivo en el título de la Euro 1968, y eso que no anotó en la Final. Por increíble que parezca, al no estar estipulada la tanda de penales y luego del empate a cero en la prórroga de la Semifinal contra la URSS, el árbitro propuso el lanzamiento de una moneda para decidir al finalista, y Facchetti ganó el volado aquel 5 de junio de 1968. Cinco días después, Italia conquistó su primer y único título de la Eurocopa al derrotar 2-0 a Yugoslavia.
1 PARTIDO de tres del torneo, ganó Italia: el segundo duelo de la Final contra Yugoslavia.
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