Crisis en el IEDF
| Autor | Eduardo R. Huchim |
Semanas después de haber tomado posesión del puesto, el jueves 26 de enero de 2006, el entonces nuevo presidente del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), Isidro Cisneros Ramírez, acudió a la oficina distrital II y sometió a un sorpresivo interrogatorio al coordinador Marco Tulio Galindo Gómez, a quien exigió decirle la verdad sobre una presunta "red priista" que estaría trabajando en el órgano electoral para favorecer a Beatriz Paredes Rangel, a la sazón candidata del PRI a jefa de Gobierno.
El interrogatorio, calificado posteriormente de "stalinista" por Marco Antonio Michel, representante del PRI ante el instituto, fue atestiguado por las reporteras Carolina Pavón (Reforma) y Gabriela Romero (La Jornada) y videograbado por personal de la Unidad de Comunicación Social del IEDF, a quienes Cisneros les pidió acompañarlo.
La diligencia, inusitada, fuera de normatividad y realizada sin conocimiento de los demás consejeros electorales, puso en aprietos al joven coordinador Galindo Gómez, quien, presionado por su interrogador y por la cámara de video, mencionó como operador de la supuesta "red priista" a Federico Osorio Espinosa, entonces titular de la Unidad de Coordinación y Apoyo a Órganos Desconcentrados. Éste, al enterarse del asunto, pidió una inmediata investigación a la Contraloría Interna del IEDF, a cargo de Javier Castillo Ayala, solicitud en la que coincidió el consejero presidente.
Como resultado de la investigación, que estuvo a cargo del director de Atención Ciudadana y Responsabilidades, Rigoberto Salgado Beltrán, la Contraloría determinó no iniciar "procedimiento administrativo disciplinario" alguno porque no halló elementos para hacerlo. No podía hallarlos porque la tal "red" no existía más que en un anónimo que el anterior consejero presidente, Javier Santiago Castillo, le entregó supuestamente a Cisneros y motivó la irregular actuación de éste como "investigador".
El asunto causó un escándalo que involucró incluso a Víctor González Torres, el doctor Simi, porque presuntamente con dinero suyo se habían pagado 40 mil pesos mensuales a los integrantes de la "red", lo cual fue desmentido de inmediato por la oficina de prensa de González Torres. Algunos dirigentes del PRD y el PAN, actuando con ligereza y candor, llegaron a exigir incluso que "se limpiara" al IEDF.
Aquél fue el primer signo de la peculiar personalidad de Isidro Cisneros Ramírez, académico que presume de haber sido discípulo de Norberto Bobbio. En poco más de dos años de ejercicio, Cisneros ha mostrado falta de aptitud y de equilibrio en la conducción del IEDF y lo ha llevado a un deterioro interno que puede repercutir en la calidad de las próximas elecciones en el...
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