Crece piratería en la UE
| Autor | Inder Bugarin |
REFORMA / Bélgica
El fenómeno de la piratería se ha disparado en la UE desde finales de la década pasada, convirtiéndose en un reto a combatir antes y después de la integración de 10 nuevas naciones consideradas por la Policía Internacional (Interpol) como verdaderos "paraísos de la fayuca discográfica" y puntos de distribución de los mayores centros de producción de mercancías piratas como China y Rusia.
En el 2001, fueron interceptados 95 millones de artículos en las fronteras comunitarias por un valor en el mercado superior a los 2 mil millones de euros, lo que significa un incremento del 850 por ciento respecto a 1998 y "muestra la magnitud de la escalada de este tipo de fraudes", destaca la oficina de Bolkestein en un memorando sobre piratería difundido a finales de enero.
Ante esta situación, el comercio de mercancías de contrabando tiene contra la pared a la Unión Europea. Las instituciones comunitarias y las autoridades de los Estados miembros no sólo han fracasado en su batalla contra el negocio ascendente de la piratería, sino además han demostrado no estar preparados para afrontar los inmediatos desafíos que amenazan la seguridad ciudadana y la estabilidad del mercado único europeo, esto sin considerar la integración el 1 de mayo del 2004 de 10 naciones.
Una clara preocupación es la creciente actitud criminal que está adoptando el negocio de la piratería que ingresa a la Europa comunitaria. La unidad contra crímenes de propiedad intelectual de Interpol sostiene que bandas terroristas están recurriendo al comercio ilícito de artículos para financiar sus movimientos, mientras que el crimen organizado está controlando la producción y contrabando no sólo de artículos de consumo cotidiano, también armas, aviones y tecnología para realizar operaciones de sabotaje cibernético.
"Europa enfrenta una situación preocupante frente a estas actividades cada vez más peligrosas" reconoce el comisario europeo de aduanas, Frits Bolkestein.
"La falsificación y piratería son una amenaza a la innovación y la creatividad y tiene particular perjuicio en la economía, salud y seguridad de los consumidores", añade.
De acuerdo con la Comisión Europea, prácticamente todos los artículos que se puedan comercializar son vulnerables para el contrabando y la falsificación, aunque el negocio ilícito de cigarros continúa siendo uno de los sectores más lucrativos en la Unión.
Italia, Reino Unido, Alemania y España aparecen como las principales plazas de tabaco...
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