Crece en la India violencia religiosa

NUEVA DELHI (REUTERS/EFE).- Al menos 30 personas murieron ayer en un nuevo brote de violencia ocurrido cerca de la ciudad india de Ahmedabad, en el occidental estado de Gujarat, donde las autoridades locales y el Ejército indio han perdido el control por los enfrentamientos entre musulmanes e hindúes, que han dejado ya casi 300 muertes desde el miércoles pasado.

El último episodio de violencia se registró en la localidad de Pandarbada, al este de Ahmedabad, donde hombres armados prendieron fuego a numerosas viviendas y quemaron vivas a unas 30 personas, informó la prensa local.

Según estas fuentes, las víctimas eran musulmanas y los atacantes hindúes. Sin embargo, el Gobierno no ha confirmado la información.

Mientras tanto, Ahmedabad, la ciudad más importante del estado de Gujarat, vivió otra jornada de caos, pese a la llegada en las últimas horas de trece columnas del Ejército indio para intentar controlar la situación.

Según la Policía, los enfrentamientos entre grupos de hindúes y musulmanes se multiplicaron ayer en esa ciudad, donde se han registrado la mayor parte de las víctimas de estos disturbios (más de 160) que amenazan con extenderse a las zonas rurales.

Más de 2 mil personas, incluidas numerosas mujeres, participaron cerca de la mezquita en una batalla campal entre hindúes y musulmanes, armados con barras de hierro, palos de hockey y distintos tipos de armas blancas.

Al menos cinco personas...

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