Se crea la Ley de Control, Adopción y Bienestar de los Animales de Compañía para el Estado de Coahuila de Zaragoza.
| Año | 2020 |
| Autor de la iniciativa | Diputado José Benito Ramírez Rosas, de la Fracción Parlamentaria “Venustiano Carranza Garza”. |
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Congreso del Estado Independiente, Libre y Soberano de Coahuila de Zaragoza “2020, Año del Centenario Luctuoso de Venustiano Carranza, el Varón de Cuatro Ciénegas”
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Iniciativa con proyecto de Decreto, por el que se crea la Ley de Control, Adopción y Bienestar de los Animales de Compañía para el Estado de Coahuila de Zaragoza.
Planteada por el Diputado José Benito Ramírez Rosas, de la Fracción Parlamentaria “Venustiano Carranza Garza”.
Fecha de Lectura de la Iniciativa: 24 de Junio de 2020.
Turnada a la Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia.
Lectura del Dictamen:
Decreto No.
Publicación en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado:
Iniciativa con proyecto de decreto que presenta el suscrito, Diputado José Benito Ramírez Rosas, de la Fracción Parlamentaria “Venustiano Carranza Garza” de la LXI Legislatura del Honorable Congreso Independiente, Libre y Soberano de Coahuila de Zaragoza, por el que se crea la Ley de Control, Adopción y Bienestar de los Animales de Compañía para el Estado de Coahuila de Zaragoza, al tenor de la siguiente...
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
En enero pasado, la secretaria de Ecología y Medio Ambiente en Coahuila, Eglantina Canales, otorgó un reconocimiento al director de Protección y Control Animal de Monclova, Martín Gómez, por haber esterilizado, en 2019, a mil 200 perros y gatos, además de otras acciones que permitieron reducir “en buena medida” la cantidad de animales en condiciones de calle.
Desconocemos si otros ayuntamientos del Estado fueron igualmente reconocidos por realizar labores similares; mientras tanto, este hecho en particular nos permite confirmar, primero, que sí es posible combatir exitosamente el maltrato animal, así como la proliferación de mascotas abandonadas y, por consiguiente, prevenir problemas de salud pública por zoonosis y contaminación ambiental, y, segundo, que, para tal efecto, se requiere voluntad política, lo mismo que disposiciones adecuadas en materia de bienestar de los animales de compañía.
Con base en este convencimiento, prácticamente desde que entró en funciones la actual Legislatura he venido insistiendo en la necesidad de que cada gobierno municipal disponga lo necesario para ofrecer una atención integral a las mascotas, sin dejar de lado el control efectivo de la proliferación de estas, principalmente de perros, pues ello atenta contra la salud ciudadana.
Mediante visitas y reuniones que he sostenido, tanto locales, como regionales, con representantes de varios ayuntamientos, y luego de exponer este serio problema en por lo menos cuatro ocasiones desde esta misma tribuna, a partir de febrero de 2018, he pugnado para que la totalidad de las 38 cabeceras municipales de la entidad cuenten con sus correspondientes Centros de Control Animal (o “centros antirrábicos”) como hasta ahora se les denomina.
En diferentes foros he propuesto también que, a través de la adecuación del marco legal respectivo, se inhiban los actos de crueldad animal, mismos que en su momento pudimos detectar, cuando lo ideal es que las familias que poseen animales de compañía, además de alimentarlos y protegerlos correctamente, los vacunen, desparasiten, esterilicen y les coloquen alguna clase de identificación.
En efecto, perros y gatos, por ejemplo, pueden trasmitir unas 150 enfermedades, entre ellas, la rabia, así como padecimientos gastrointestinales, dermatológicos y conjuntivitis, provocada por la desecación de las heces fecales que los animales dejan en la vía pública, entre otros males que generan dichas evacuaciones.
Como se recordará, Coahuila fue catalogado por la firma Mitofsky como un Estado “amante de los perros”, pues 74% de las familias cuentan con al menos uno de estos animales en casa. Esto parece ser confirmado con datos de la Secretaría de Salud, que apuntan al hecho de que los coahuilenses convivimos con alrededor de un millón de perros, pero 60% de estos deambulan sin control alguno.
Ante esta realidad, reportes oficiales señalan que sólo cuatro municipios cuentan con Centros de Control Animal: Saltillo, Torreón, Francisco I. Madero y San Pedro de las Colonias. De Sabinas se afirmaba que también operaba un centro canino, pero esta información resultó falsa. En cuanto a los 34 ayuntamientos restantes, algunos decidieron, bajo diversos argumentos, eliminarlos, y otros, simplemente prefieren seguir omitiendo el incumplimiento de esta obligación legal.
Otro dato preocupante es que, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies, la población de mascotas en situación de calle crece alrededor de 20% anual, que en el Estado equivale a unos 200 mil perros. Frente a esta acelerada proliferación, el Gobierno del Estado no cuenta con capacidad sino para practicar sólo 8 mil esterilizaciones por año.
Protección Animal Mundial recomienda esterilizar perros callejeros, pero también canes y felinos que conviven con las familias dentro de sus casas. Dicha asociación civil también hace énfasis en la tenencia responsable, así como en el registro de mascotas y la educación ciudadana sobre su adopción y cría.
Definitivamente, por tratarse de una cuestión de salud pública, el control, principalmente canino y felino, es un asunto de atención prioritaria, pues, insisto, las mascotas lanzadas que constantemente lanzan las familias, además de representar un peligro para el transeúnte, son agentes de propagación, como ya he dicho, de múltiples enfermedades e infecciones de tipo viral, gastrointestinales, dermatológicas, ópticas y respiratorias, entre otras.
Cabe resaltar las responsabilidades vigentes para los propietarios de animales de compañía y para las autoridades de salud y medio ambiente, según lo establecido en el artículo 3 de la Ley de Vida Silvestre para el Estado de Coahuila, referente al ordenamiento legal que regula la situación referente a los animales domésticos y aquellos que se encuentren en cautiverio.
Así mismo, en el artículo 4º, inciso B, fracción XVIII de la Ley Estatal de Salud, y a otras disposiciones de este mismo ordenamiento legal, como los artículos 6º, 107, fracción V; 111, fracción IV; 120, 239 al 242, y a lo previsto en la Ley de Protección y Trato Digno a los Animales para el Estado de Coahuila de Zaragoza, artículos 6, 10 al 15, 20, 57 al 65, 80 y 81. Igualmente, en conformidad con lo dispuesto por la Ley de Protección y Trato Digno a los Animales para el Estado de Coahuila de Zaragoza, en lo referente a los Centros de Control Animal, Artículos 57 al 65, y Capítulo Segundo, Artículos 14, 15, 19 y 20.
Es un hecho que los 38 Ayuntamientos de Coahuila, en función de sus competencias y atribuciones, y en cabal cumplimiento a la Ley de Protección y Trato Digno a los Animales para el Estado de Coahuila de Zaragoza, tienen la impostergable responsabilidad de crear áreas para la protección y bienestar animal, y, la Secretaría de Finanzas, la obligación compartida de coadyubar para el logro de este objetivo, lo mismo que la Secretaría de Salud, en el empeño de reducir la sobrepoblación canina y provenir padecimientos por zoonosis.
Por su parte, la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de Coahuila de Zaragoza, como los gobiernos municipales de la Entidad, no están exentos de observar la Ley de Protección y Trato Digno a los Animales para el Estado de Coahuila de Zaragoza, sobre todo lo dispuesto en los artículos 13 y 14 de este ordenamiento, en cuanto a vigilar el debido cumplimiento de las disposiciones legales en materia de protección y trato digno a los animales, como en imponer en los términos previstos en la presente Ley, las sanciones que procedan por la comisión de infracciones, conforme a las disposiciones aplicables; aplicar las disposiciones jurídicas relativas a la protección y trato digno de los animales prevista en esta Ley; y establecer y aplicar las medidas correctivas e imponer sanciones correspondientes por infracciones a la presente ley, sus reglamentos y demás disposiciones en el ámbito de sus respectivas competencias”.
Así pues, contamos con un marco jurídico de referencia muy sólido y moderno, con base en el cual se concibe la Ley planteada en la presente iniciativa, que también se apropia de las premisas que se abren paso entre los defensores de los derechos de los animales, en especial, de los clasificados como “de compañía”.
La propia administración pública federal se ha pronunciado incluso a favor de que se le dé un giro nuevo al quehacer de los tradicionales “centros antirrábicos”, también identificados como “centros de control animal”, que ahora pasarían a denominarse “Centros de Control, Adopción y Bienestar Animal”, los cuales están llamados a ocuparse, tanto de mascotas con dueño(a), como de animales que se encuentren en situación de calle.
Parte del planteamiento consiste en que estos establecimientos municipales realicen una función más completa, en estricto apego a los derechos humanos, como de los animales, lo que incluye la realización de jornadas de adopción y capacitación para el bienestar animal.
Se prevé también la prohibición de sacrificios de mascotas, excepto cuando existieren razones humanitarias para...
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