A Corto Plazo/ Agenda de mediano plazo
| Autor | Samuel García |
En su intervención ante la comunidad financiera nacional en un evento organizado por la agencia calificadora Moody's la semana pasada, el Gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz, diseñó lo que sería una agenda de mediano plazo a fin de paliar la exposición de la economía mexicana ante la volatilidad de eventos externos.
Si bien la propuesta de agenda del Gobernador no es novedosa por los elementos que la conforman, sí es digno de destacar que -una vez más- el Banco Central sea la fuente de análisis, información y -ahora- de agenda económica ante el inexplicable silencio del equipo económico del Gobierno federal. Máxime cuando en una coyuntura caracterizada por la incertidumbre y la alta volatilidad financiera, como la que estamos viviendo, los agentes económicos están naturalmente ansiosos por escuchar planes y acciones concretas por parte del Gobierno.
De acuerdo con el Gobernador del Banco Central, por lo menos seis son los asuntos de la agenda económica para el mediano plazo en el país: 1. Estabilidad macroeconómica con una inflación del 3 por ciento hacia el 2003, 2. Aprobación de la Reforma Fiscal que disminuya presiones a las finanzas públicas, 3. Promoción de la inversión privada en el sector eléctrico y creación de un mercado con tarifas razonables e inversiones por 6 mil millones de dólares anuales, 4. Reactivación del crédito bancario y reestructuración de vencimientos de la deuda pública, 5. Desregulación de la actividad económica, y 6. Promoción y crecimiento del mercado de fondos de pensiones.
La agenda de asuntos económicos por atender que propone el Banco Central si bien no es una colección de temas nuevos, sí establece prioridades y marca un rumbo encaminado hacia dos objetivos: avanzar en la estabilidad macroeconómica y reducir vulnerabilidades ante factores externos que, según parece, se han convertido en una constante.
Otro tema es si estamos o no de acuerdo con esta lista de asuntos que presenta Guillermo Ortiz. Lo importante es que ésta es una agenda de asuntos que puede convertirse en un punto de partida para la discusión económica y articular, en torno a ella, un programa económico de mediano plazo que hasta hoy no ha aparecido en el ámbito del Gobierno federal; si acaso sólo se han soltado al viento ideas sueltas y desarticuladas a través de los mensajes presidenciales y de las conferencias de prensa convocadas por el coordinador de políticas públicas. De hecho éste es un factor que alimenta la incertidumbre...
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