Correspondencia simpliciana de aquí para allá (1846)

AutorGuillermo Prieto
Páginas87-89
87
Amado Tontini:
Ah! ¡Ah!, déjame respirar, ¡qué lástima que no tenga cortapi-
sas la imprenta!, mucha de su salsa se le ha quitado con esto
a los viperinos; ¡es tan dulce burlar una autoridad que comete
aquellas ridiculeces!
Sábete, hijo, ¡que ahora sí estamos bien! Se ha comenzado
a gastar la pólvora en salvas, y todos están a competencia de
quién lo hace mejor.
El otro Ayuntamiento comenzó por dejar las calles a la
buena de Dios, y quiso hacerse notable respondiendo en ca-
bildo pleno por el firmón del Tiempo; éste anda más tiesecito,
porque aunque siguen las calles como Dios sabe, va a dispo-
ner tales portadas y unas cositas tan chuscas para recibir al
señor Santa Anna, que nadie podrá decir “esta boca es mía”.
¡La federación está en toda su fuerza!, y como debe ser:
de aquí les mandamos comandantes generales y gobernado-
res para que salgan las cosas derechas; de suerte, que ahora
es federación de otro modo, porque eso de que cada cual
tire por su lado no puede ser: se volvería la república una
Babilonia.
CORRESPONDENCIA
SIMPLICIANA DE AQUÍ
PARA ALLÁ
(1846)
¡
Guillermo Prieto:Layout 1 6/1/12 1:34 PM Page 87

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR