Corre Videotape / Qué afán de protagonismo

AutorTony Boomer

5 Hacía mucho tiempo que no veía a Brozo en su Mañanero. Ahora, con tanto alboroto por la famosa "becaria", me decidí a verlo otra vez y le puedo decir que Evelyn Robles nada tiene que hacer contra el portento de mujer que es Isabel Madow. Claro, el chiste era, según entendí, traer a alguien completamente diferente, y lo lograron. Sólo que Isabel tiene un "sex appeal" tan grande que simplemente hacía que esperáramos el momento en que iba a salir a escena, las mujeres para destrozarla por su minirropa, y los hombres para despertar tempranito y con mucho morbo. Isabel no necesitó hablar ni, como Evelyn, leer poemas de Sor Juana Inés de la Cruz para tener a todo México al pendiente de sus sensuales curvas. La nueva, pues es nueva, como que un poquito deschistadita, bonita, pero no imponente como Isabel. En fin que mientras vemos qué tal se desenvuelve la becaria, déjeme le cuento que El Mañanero ya no es el mismo. Tantos comerciales, tantas entrevistas al artisterío de Televisa le han quitado ese "chacoteo" de cuando estaba en CNI Canal 40. No quiero decir que es completamente malo, pero el chiste de El Mañanero era que se pitorreaba de nuestros políticos de la forma más obscena y a todos nos encantaba. El nuevo Mañanero se va en gritos, canciones, secciones pagadas, infomerciales, chistes y albures, la nueva becaria... ¿y el agudo análisis que nos tenía como adictos a Brozo? Pues casi no lo vemos, ¡qué pena!, ¿no?

4 Regresó Eduardo Salazar y, como era de esperarse, fue recibido como todo un héroe de guerra. Salazar se lo merece y, pues, era normal que su jefe y maestro, Joaquín López Dóriga, lo tuviera en su estudio para darle el gran homenaje. Y, efectivamente, lo tuvo. Lástima que el homenaje se convirtió en: "mira, Eduardo, tú pudiste haber estado donde estallaban las bombas, pero aquí el mero, mero soy yo, así que escucha bien lo que te voy a decir porque estas palabras valen oooooro". Si López Dóriga no desaprovecha oportunidad alguna para ser protagonista, ¿por qué iba a hacerlo ahora? Primero le hizo preguntas tan rebuscadas que Salazar no alcanzaba a saber si debía contestar o no. Y luego, cuando le preguntó por sus hijos, Salazar le dijo que su pequeño Iñaki lo había cuestionado sobre por qué tantos muertos y tantas bombas en Bagdad. "Realmente no sabía qué responder, Joaquín"; "Eduardo, a los hijos hay que escucharlos, no responderles todo"... ¡así o más docto en cuestiones de crianza familiar! Por el bien de El Noticiero, esperamos...

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