Coronan el dogma

AutorEsteban Israel

MURAL / Italia

EL VATICANO.- La elección ayer del Cardenal alemán Joseph Ratzinger como sucesor de Juan Pablo II fue para los analistas sobre todo una victoria del dogma.

Benedicto XVI promete más disciplina y menos reformas, más centralismo y menos apertura hacia el Islam, de acuerdo con los expertos en la Iglesia católica.

"Es un triunfo del dogma y de la restauración de la fe", dijo a MURAL la socióloga de la religión Maria Immacolata Macioti, de la Universidad La Sapienza de Roma.

Ratzinger fue durante 24 años Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, la ex Inquisición.

Aunque durante el Concilio Vaticano II fue un activo teólogo progresista, los años fueron desplazando a Benedicto XVI hacia la derecha hasta ser percibido hoy por vaticanistas como símbolo de la intransigencia.

Desde su despacho en el Palazzo del Santo Ufficio mandó prohibir libros, excomulgar a teólogos disidentes y castigar Obispos revoltosos. Además escribió en el 2000 el documento Dominus Iesus donde sugiere que la única vía a la salvación es el catolicismo. Todo en nombre de la fe.

El historiador de la iglesia Giovanni Maria Vian describe el nombramiento de Ratzinger como una elección institucional. Los Cardenales no votaron sólo por sus ideas ultraconservadoras, dijo, sino por el personaje.

"Es sin duda la mejor mente del Colegio de Cardenales, un personaje con una autoridad incuestionable. Tanto que incluso sus enemigos le reconocen su estatura intelectual", dijo a MURAL el historiador de La Sapienza de Roma.

Un centralista

La elección de un Cardenal de la Curia Romana echa por tierra la esperanza de descentralización del poder amasado por el Vaticano, un reclamo de los purpurados de todas las corrientes ideológicas.

El filósofo italiano Giulio Girardi, uno de los precursores de la Teología de la Liberación que Ratzinger combatió hasta expulsarla de la Iglesia, cree que Benedicto XVI seguirá las huellas doctrinales de Juan Pablo II.

"Al elegirlo los cardenales optaron por una perfecta continuidad con Juan Pablo II. Por eso escogieron una personalidad que siempre estuvo cerca del Papa anterior y -de alguna manera- inspiró siempre sus orientaciones doctrinales", dijo a MURAL.

"La línea del próximo Papa será la línea del Cardenal Ratzinger. Quizás haya algún cambio formal, pero no de sustancia", añadió.

"En el contexto alemán, se le percibe como muy conservador y alguien que ha batallado mucho con los Obispos y católicos alemanes", indicó Florian...

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