Coordenadas / La engañosa salud de las finanzas públicas
| Autor | Enrique Quintana |
Si llegara a México algún experto en finanzas públicas y viera las cifras del balance económico del Gobierno, no podría sino concluir que el Gobierno mexicano cuentas con finanzas completamente sanas, como lo demuestra el superávit de más de 27 mil millones de pesos que se registró en el primer trimestre del año.
Pero resulta que, cuando se contabilizan los llamados requerimientos financieros del sector público, en lugar de superávit aparece un déficit en el trimestre de más de 26 mil millones de pesos.
Y, peor todavía, cuando se ve el saldo acumulado de estos requerimientos totales de fondos del sector público, encontramos que en el primer trimestre del año, siguen para arriba y que ya suman 2 billones 808 mil millones de pesos, lo que representa un incremento de 66 mil millones de pesos respecto a diciembre del año pasado.
En otras palabras, las deudas no se contienen sino que siguen incrementándose. Y, eso que, como ya le hemos comentado ampliamente en este espacio, no se contabilizan los pasivos laborales que tiene el Gobierno.
El primer trimestre del año, además, volvió a ser muy elocuente respecto a la forma en que nuestra suerte está ligada al petróleo. Los ingresos petroleros crecieron en el trimestre en 38.6 por ciento y su incremento explica el 44 por ciento del incremento de los ingresos totales del sector público.
Imagínese cómo estarían las finanzas públicas en estos momentos si en lugar de haber un crecimiento de los ingresos petroleros se hubiera presentado una caída equivalente. ¿Imagina lo que sería para el sector público perder 38 mil millones de pesos en un solo trimestre?
Pero, con todo y los incrementos, apenas van en línea con lo presupuestado. Hay una ganancia de 5 mil millones de pesos en relación con lo que ya estaba comprometido en el presupuesto.
Y, cuando se ve la situación de la captación de impuestos, pues no es para brincar de felicidad.
Aunque ha crecido respecto al año pasado, la captación de ISR hasta marzo iba 5 mil 800 millones de pesos por debajo de lo presupuestado. Es decir, con esta sola diferencia ya se consume todo el excedente petrolero.
En todo caso, las ventas comerciales han resultado mejor de lo previsto y la recaudación de IVA compensa la pérdida de ISR con un extra de 4 mil 900 millones de pesos con relación a lo previsto.
Pero, cuando ya se pone todo en términos netos, los impuestos captados por el Gobierno van con un retraso de poco más de mil millones de pesos respecto a lo que debían...
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