COORDENADAS / Prepararse para una revisión del TLCAN

AutorEnrique Quintana

Quizá sea tiempo de proponer una agenda de lo que a México le gustaría renegociar si se reabriera el TLCAN.

De acuerdo a las encuestas más recientes, Barak Obama es por ahora quien tiene más posibilidades de convertirse en el próximo Presidente de los Estados Unidos, pues las mediciones de intención de voto le dan una ventaja de 10 a 15 puntos respecto a McCain, el candidato republicano.

Y da la casualidad de que una de las propuestas del virtual candidato demócrata, que puntea en las encuestas, es la reapertura del Tratado de Libre Comercio de Norteamérica.

Una de las bases más importantes del Partido Demócrata es la de los sindicatos industriales, y en esta coyuntura de bajo crecimiento económico Obama ha incluido la revisión de los términos del TLCAN como una de las ideas de su campaña.

En la página oficial de su campaña se puede ubicar fácilmente su propuesta, que no fue simplemente tema de discursos.

En su plataforma, vaya al tema Economía y de allí al subtema Comercio.

Dice textualmente la página del candidato:

"Obama cree que el NAFTA y sus potencialidades fueron sobrevendidos a los estadounidenses. Obama trabajará con los líderes de México y Canadá para arreglar el Tratado de tal modo que funcione mejor para los trabajadores de los Estados Unidos".

En términos más prácticos, esto significa que se queden más trabajos en Estados Unidos y se instalen menos empresas norteamericanas en México.

Hay dos reacciones cuando se leen este tipo de propuestas.

La primera es pensar que se trata de un mero discurso electoral y que si llegara a ganar en noviembre, Obama no cambiará nada en materia del Tratado.

La otra es tomarse en serio esa posibilidad, sobre todo porque el respaldo que McCain ha dado al TLCAN seguramente va a polarizar aún más la posición de Obama, como una forma de distinguirse.

Esta semana, que estará en México el virtual candidato presidencial republicano, probablemente hará referencia a su respaldo al libre comercio y en particular al TLCAN.

Sin embargo, por lo pronto, Obama lleva la delantera y lo peor que le podría pasar a México es que en los primeros meses del 2009 nos enfrentáramos con un nuevo Gobierno en Estados Unidos que nos fijara la agenda de lo que quiere revisar del Tratado.

Como se ha comentado en muchas ocasiones, el propio Tratado establece los mecanismos para su revisión y si, en efecto, se reabriera, cada país trataría de poner en la agenda lo que considere pertinente a sus intereses.

Y, obviamente, Estados...

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