Coordenadas / El maltrato del tiempo

AutorEnrique Quintana

Hay algunos que simplemente necesitarían ser mejor organizados. Pero hay otros que en lugar de usar, parecen abusar del tiempo.

Steven Berglas, psicólogo de UCLA, caracteriza a cuatro abusadores crónicos del tiempo: los preventivos; los que dicen sí a todo; los perfeccionistas y los incumplidos.

Aunque los casos que analiza son patológicos, basta con que le quite usted esa gravedad verá que cada uno de estos personajes le aparece en cualquier escritorio cercano... sino es que en el suyo.

Veamos cada uno de esos cuatro tipos.

  1. - Los preventivos.

    ¿Conoce usted a alguien que tiene planeada su vida con meses de anticipación? Se trata de personas que anotan en su agenda sus vacaciones de los próximos dos o tres años. Y, en el trabajo son compulsivamente ordenados.

    ¿En dónde está el problema con este tipo de personajes? Con frecuencia, no lo hay. Sin embargo, cuando forman parte de equipos el problema aparece, pues usualmente ignoran la forma en que su conducta afecta a sus colegas. Terminan antes que los demás sus asignaciones y su obsesión les impide sincronizarse con los otros. De esta manera, su buen trabajo frecuentemente signigfica un mal trabajo del equipo en el que laboran.

    En el fondo lo que tienen es un temor exagerado al desorden.

    Una opción es ponerlos al frente de equipos en los que tengan que responder por los demás. Dice Berglas que se ha verificado que eso tiende a hacerlos más flexibles, al mismo tiempo que se aprovecha su sentido del orden.

  2. - Los que dicen que sí a todo.

    Casi siempre en cada lugar de trabajo hay quien no saber decir no. Me re. ero al trabajo, desde luego. Y como hay muchos que abusan de la disposición de estos personajes, entonces los encontrará frecuentemente saturados de tareas que no corresponden con sus responsabilidades, sino con las de los demás.

    Son personas que tienen una necesidad patológica de reconocimiento, al mismo tiempo que un gran temor al rechazo.

    Una estrategia para lidiar con estas personas es aprovechar su disposición y necesidad de reconocimiento para ofrecérselo por las tareas que les son propias. Otros han optado por integrarlos a los equipos staff, que se dedican a satisfacer las demandas de diversas áreas de la empresa.

  3. - Los perfeccionistas.

    Seguramente conoce el dicho que a. rma quelo perfecto es enemigo de lo bueno. Pues en este caso se a. rma plenamente. Estas personas asumen su perfeccionismo como una de sus principales cualidades. No hay puntos medios en su trabajo, es todo o...

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