ConVino

AutorAntonio Laveaga

Muchos ya están ansiosos por empezar el famoso "maratón Lupe-Reyes", pero también hay algunos otros que "pisamos raya" y nos adelantamos desde hace rato en esta sacrificada labor.

Mañana será otro día, y el exceso de comida y bebida se verá multiplicado por el arrepentimiento y dieta para después del 6 de enero, una vez partida la Rosca de Reyes, donde siempre pagamos factura.

Pero disfrutando el hoy, ¿qué comer y beber en estas fechas? De mi parte lo tradicional: buñuelos, tamales, pavo, lomo, bacalao, etcétera; esto en cuanto a comida.

En lo que respecta a las bebidas, es raro pensar que se tomen bebidas alcohólicas calientes, es más, casi hirviendo; pues las hay, y muchas, para aminorar el frío.

Empiezo con nuestro ponche navideño, de frutas, hecho a base de infusiones y servido preferentemente en jarritos de barro con su buena dotación de fruta como caña, tejocote, etcétera.

Pero aquí viene lo bueno, el tradicional piquete, que generalmente es el añadido alcohólico a todos estos brebajes.

En la mayoría de los casos se emplea el ron, por su precio, pero en otras ocasiones puede ser brandy, whisky, vino y, algunas veces, hasta vino espumoso.

Lo que lo hace diferente a los demás es la variedad de especias y frutas que se le pueden agregar, como lo son: canela, clavo, anís y diversidad de frutos rojos; dándole personalidad a la bebida.

No es el único líquido caliente ni estacional que acompaña estas fechas, en Estados Unidos se bebe el eggnog, bebida hecha de leche, azúcar, huevo y se le puede incorporar alcohol (similar a nuestro rompope).

El eggnog se sirve desde el Día de Acción de Gracias, tercer jueves...

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