Consejos humanos de todo corazón

Engaño "desenchufante"

Hola, Tía Remedios, te mando muchos saludos. Quisiera que me ayudaras porque hace como un año y medio tuve problemas con mi esposo y lo encontré en pleno acto sexual en el estacionamiento de su trabajo, entonces nos peleamos y estuvimos a punto de separarnos; sin embargo, eso no ocurrió y desde entonces yo he estado viviendo como por inercia y como que mi libido se quedó ahí porque no he tenido deseo sexual desde entonces. No sé si sea algún tipo de trauma que me quedó o qué, pero sí creo que no es normal porque antes era muy activa sexualmente. Quisiera que me dieras tu opinión y una recomendación sobre lo que debo hacer, porque quiero retomar la alegría y ya no ser sólo un robot que anda por ahí, ya quiero salir de este bache. Muchas gracias y espero que puedas ayudarme.

Esmeralda, 34 años.

¡Hooola!, querida Esmeralda. ¿Y qué hizo que no te separaras de tu esposo a pesar de que pescaste con las manos en las nalgas de otra (¿o de otro?). ¿A qué te quedaste?, ¿qué esperabas que ocurriera contigo? En fin, la única manera en la que lograrás destrabarte realmente por lo ocurrido es acudiendo a terapia, ya que no hay pastillas, geles o cápsulas mágicas que liberen del dolor, la decepción, el encabronamiento, la culpa y todas las posibles emociones que te haya generado el asunto en el que pescaste a tu marido. El deseo sexual está relacionado con una saludable relación de pareja, y, por lo visto, esto no está pasando, así que tienes que echarle galleta a resolver lo que sientes. Te recomiendo que acudas a un especialista que te ayude a resolver ese problema, que te ha acarreado dificultades en tu persona. La terapia te ayudará.

Enlelada en su tablet

Hola, Tía, me dirijo a ti porque la verdad estoy desesperada. Lo que pasa es que en Navidad, mi esposo y yo le regalamos una de esas tablets a nuestra hija de 10 años y desde entonces se ha enviciado mucho viendo esa cochinada, se queda durante varias horas y ya no sé qué hacer porque es excesivo el tiempo y la atención que le presta, incluso ni come bien por estar ahí, y si se la quito o la regaño se enoja y hace berrinche. Quisiera que me dieras un consejo de qué debo hacer con ella, porque no me gustaría que se enviciara con ese aparato así como he visto a otros adultos bien metidos con ese dispositivo o con los mentados celulares. Ojalá me puedas ayudar, muchas gracias de antemano.

Margarita, 42 años.

¡Hooola!, querida Margarita. ¿Quién es la que tiene el poder en esa...

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