Confronta Semarnat a industria camaronera

AutorMarcela Turati

Por cada kilo de camarón que se pesca en el Golfo de California son arrastrados 10 kilos de fauna marina. Cada año mueren así, atrapadas en las redes camaroneras, entre 30 y 80 vaquitas marinas, cetáceos pequeños originarios de México y considerados en peligro crítico de extinción, pues quedan menos de 600 espécimenes.

"Esta es nuestra última oportunidad de salvar esta especie", advirtió ayer el Secretario de Medio Ambiente, Víctor Lichtinger, tras anunciar que se aplicará con firmeza la norma emergente 139, que prohíbe el uso de la pesca de arrastre, técnica que está dejando como desierto -sin flora y sin fauna- el fondo del Golfo de California.

El reto de conservar a la vaquita marina dentro de la Reserva de la Biosfera del Alto Golfo de California, donde habita, no se presenta fácil. Según las autoridades, las flotas camaroneras no respetan la normatividad ambiental.

La Cámara Nacional de las Industrias Pesqueras y Acuícolas (Canaipesca), las flotas pesqueras de Puerto Peñasco y San Felipe, y las industrias de congelación de camarón se oponen a las nuevas disposiciones y han organizado en su contra una campaña "casi subversiva" y "chantajista", en palabras del Procurador Federal de Protección al Ambiente, José Campillo.

Si no se modifica la técnica de pesca, que consiste en mover una extensa red por el fondo del mar arrastrando todo lo que encuentra a su paso -"equivalente en tierra a la tala de selva"-, en dos décadas no quedará ninguna vaquita marina en el mar que comparten Sonora y Baja California, advierten las autoridades ambientales.

"Es necesario proteger ese sitio de reclutamiento pesquero (lugar donde se renueva la vida de las especies marinas) que son las lagunas pesqueras y los sitios de desove que están en la Reserva de la Biosfera", señaló el director del Instituto Nacional de Ecología, Exequiel Ezcurra, al anunciar la estrategia de conservación del cetáceo, considerado el más pequeño del mundo.

La estrategia busca: monitorear a las poblaciones de vaquita marina; desarrollar métodos de pesca alternativos y sustentables; definir los sitios donde se renueva la vida marina para que no sean dañados; beneficiar económicamente a la población local; emprender campañas de sensibilización sobre la necesidad de proteger la especie, y aplicar...

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