Confíe su espíritu a líderes expertos

AutorNatalia Vitela

En un intento por recuperar la espiritualidad que ha ido perdiendo, acepta inscribirse a un retiro al que acudirán sus amigos o que le sonó prometedor en un anuncio publicitario.

Sin embargo, sus buenas intenciones pueden verse frustradas si se realizan actividades que para algunas personas, según su condición de salud, resultan riesgosas, como hacer ayunos.

Además, puede suceder que los asistentes sean dirigidos por un líder fanático que incluso ponga

en riesgo su vida, advierte Josué Tinoco, especialista en religión de la Universidad Autónoma Metropolitana Iztapalapa.

Por ello, antes de acudir a un retiro espiritual, señala el experto, es necesario que las personas sepan qué tipo de retiro harán y por qué quieren hacerlo.

Después, indica Tinoco, deben cerciorarse que participen personas que estén capacitadas en primeros auxilios. Además, se debe contar con un botiquín

médico.

Asimismo, precisa Roberto Rivadeneyra, coordinador académico de la Facultad de Filosofía y Ciencias Sociales de la Universidad Panamericana, tienen que saber qué actividades se realizarán.

"Es importante que los participantes de los retiros sepan a qué van y si el retiro incluirá ayuno o actividades físicas muy demandantes, para que puedan decidir si ir o no. Generalmente en un retiro espiritual no se le obliga a nadie a realizar todas las actividades, sobre todo si su salud corre algún tipo de riesgo.

"Si es un retiro de ayuno debería primero realizarse un chequeo médico que le autorice llevarlo a cabo los días que se tienen programados. La responsabilidad en estos casos es de las personas que van. Evidentemente, un diabético o un hipoglucémico difícilmente podrá realizar ayunos, pues podría costarle la vida. Lo mismo sucedería con alguien que padece de presión alta, tiene problemas cardiacos o algún otro tipo de padecimiento", puntualiza Rivadeneyra.

ALERTA Y PROPÓSITO

Tinoco advierte que existen líderes religiosos que para los retiros organizan actividades que ponen en riesgo la vida los asistentes, pues creen que el extremo les permitirá ser cada vez mejores y que son elegidos.

"Se han dado casos donde se les exige no comer durante el tiempo del retiro, por ejemplo, con el propósito de llevar al extremo el cuerpo físico. En otras son víctimas de vejaciones y humillaciones con el propósito de mantener una cohesión grupal, una identidad grupal. Se pierde el límite de lo que sería deseable".

El problema, aclara, es que muchas personas no cuestionan estas situaciones...

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