La confianza como insumo

AutorLuis Carlos Ugalde

En México, el control sobre los gobernantes se diseñó y se ha ejecutado principalmente desde el propio Estado y no desde la sociedad. Para ello se crearon burocracias vigilantes de otras burocracias para controlar el abuso del poder y combatir la corrupción.

Pero en ese proceso de vigilantes vigilando a otros vigilantes, la sociedad -que debiera ser el vigilante último en una democracia- ha estado ausente.

Lejos de alcanzar su objetivo, esos controles internos con frecuencia han dado lugar a la sobrerregulación, a la "tramitología" y han sido ineficaces para procurar la honestidad de las instituciones de gobierno. La Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental colocará a la sociedad como el sujeto más importante a quien se le debe rendir cuentas.

La ley es ejemplo de negociación productiva entre diversos actores políticos. Sus autores entendieron que en política lo útil es resultado de la combinación entre lo deseable y lo factible.

Esa actitud facilitó el acercamiento de posiciones e hizo posible la aprobación de la ley por unanimidad en el Congreso de la Unión.

Se debe reconocer la tarea realizada por el gobierno federal que llevó a cabo una consulta pública, elaboró una propuesta propia y tuvo la sensibilidad para negociar y acercar su posición con la de otros actores.

Por parte de la sociedad y el mundo académico, gran mérito tiene el Grupo Oaxaca por su articulación y capacidad de generar una propuesta que sirvió de ancla para encauzar el debate y estimular la atención política sobre un tema tan relevante.

Finalmente, los partidos al interior del Congreso abrieron un foro de debate y negociación para que las distintas propuestas se fusionaran en una sola que fue finalmente aprobada.

Los retos

El primer reto es el de la capacidad administrativa, que consiste en la pericia del gobierno para adaptar sus sistemas de información, innovar su tecnología y capacitar a los servidores públicos para dar respuesta a las demandas de información.

Los méritos de la ley pueden desvirtuarse si los sujetos obligados son incapaces de cumplir con el caudal de información que les sea solicitada. Debe tenerse en mente que modificar las estructuras burocráticas del país acostumbradas a funcionar en la opacidad será un proceso que trascienda el plazo de un año que la ley exige para que todas las dependencias del gobierno coloquen su información en la vitrina pública.

Por ello el gobierno debe aprovechar la oportunidad que le...

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