Condenado al abandono

AutorJonathan Lomelí

Para conocer el destino de parte de la obra del fundador de la arquitectura mexicana moderna, el jalisciense Luis Barragán (1902-1988), basta imaginarse lo peor que le podría pasar.

La primera etapa creativa del único arquitecto mexicano ganador del prestigioso premio Pritzker, transcurrió en Guadalajara de 1927 a 1935, donde realizó cerca de 30 edificaciones y remodelaciones.

Todas están catalogadas como patrimonio cultural por su valor artístico e histórico, sin embargo, eso no les ha garantizado su preservación.

Para muestra, casos extremos como el de una finca abandonada y sujeta a un proceso de embargo; otra, al lado del Templo El Santuario, sirve para la venta ilegal de medicamentos.

Y cuando son valoradas, sus dueños no tienen la solvencia económica para su restauración y conservación.

La ley señala que propietarios y autoridades deben proteger los bienes patrimoniales, pero no faculta al Estado o al Municipio para que obligue al dueño a restaurar el edificio.

"No hay los instrumentos jurídicos suficientes como para hacer una intervención directa porque es propiedad privada y se requiere una voluntad mínima por parte del dueño para que la finca se proteja", reconoció Juan Palomar, vicepresidente de la Fundación de Arquitectura Tapatía Luis Barragán.

Las acciones de la autoridades se limitan a asesorías técnicas, apercibimientos y la condonación de impuestos por tener en buen estado el bien patrimonial.

EN PROCESO DE EMBARGO

La Casa Harper Garibi, localizada en la Calle Rayón 121 y construida por Barragán en 1934, es un caso extremo de descuido: conserva la puerta y ornamentos originales de la fachada, pero perdió la fuente de la entrada y su aspecto es el de un predio abandonado.

Roberto Hernández, su propietario desde 1985, es originario de Monterrey y señala que sólo la habita por estancias cortas. Sabe que reside en una casa patrimonial, pero reclama sus derechos como propietario legítimo del inmueble.

"Es mi casa y punto, y yo sabré cuándo la arreglo y punto", resolvió, "no sé qué le ven".

La casa está en proceso de embargo por Obras Públicas de Guadalajara desde agosto del 2007, al parecer por el retraso en el pago de contribuciones.

Justo a un lado, otra casa de Barragán construida en la misma fecha, es una prueba de que el buen estado de los edificios depende del propietario. Marcada con el 129, la finca ha sido recién adquirida por un estadounidense que invirtió en su remodelación.

MATERIA DE TESIS

El año pasado Cristina Díaz...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR