Comilona madrileña
| Autor | Sergio Zepeda |
Enviado
Y entonces dudas: ¿debes unirte al típico tour por los puntos obligados de la ciudad o seguir una ruta independiente? ¿Será mejor visitar los grandes museos o sorprenderte con una pieza de arte urbano en algún callejón? ¿Restaurantes centenarios o cocina molecular? ¿Lo de siempre?
DESAYUNO
CLÁSICO
Chocolatería de San Ginés
Lo sabe cualquiera que haya saltado de bar en bar en una noche de marcha en la capital española: el punto final del recorrido es la Chocolatería de San Ginés. Hasta ahí, muy cerca de la Puerta del Sol, llegan los juerguistas para disfrutar de una taza de espeso chocolate caliente y compartir platos de churros azucarados.
Entre miércoles y domingo este lugar abre a las 10 de la mañana y cierra a las 5:30 de la madrugada, pero para las fiestas de año nuevo la chocolatería se mantiene abierta toda la noche vieja y el primer día del año.
El lugar se encuentra en el número 11 del Pasadizo de San Ginés, y fue abierto en 1894.
www.chocolateriasangines.com
VS.
MODERNO
Harina
Frente a la Puerta de Alcalá se encuentra este local, que podría definirse como panadería boutique, que presume haber recuperado la forma antigua de hacer el pan. Aunque hay quien dice que se trata de una gran tomadura de pelo para hipsters, los propietarios de Harina presumen que aquí se puede hallar pan hecho a partir de masa madre, esa especie que se usaba para fermentarlo antes de que existiera la levadura en polvo. Hogazas, baguettes, pan de aceitunas, de tomate seco, de nuez, cruasanes, magdalenas...la variedad es amplísima. También tienen una oferta variada de bollería y jugos y café.
www.harinamadrid.com
COMIDA
CLÁSICO
Lhardy
Este es uno de esos lugares que despiertan unas ganas irresistibles de vestirse de rigurosa etiqueta. Los candelabros dorados, los muebles de caoba, las vasijas estilo oriental, los relojes suizos y los cubiertos siempre relucientes remiten de inmediato a las épocas en que, cuenta la leyenda, la Reina Isabel II solía escaparse del palacio para comer aquí.
Fundado en 1839 y ubicado en el número 8 de la Carrera de San Jerónimo, Lhardy es el lugar perfecto para disfrutar de un tradicional cocido madrileño. Otros platillos insignia: la poularda rellena y la ternera príncipe Orloff.
lhardy.com
VS.
MODERNO
Club Allard
Olvida aquello de no jugar con la comida. En Club Allard, ubicado en el número 2 de la Calle de Ferraz, se trata precisamente de eso. El chef Diego Guerrero prefiere crear menús divertidos que sorprendan a los...
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