Comedia política / El Presidente pasmado

¿Cuál es la diferencia entre rezar en una iglesia y rezar en un partido de futbol? En el partido rezas en serio. A Enrique Peña Nieto le está pasando lo que a los jugadores de mis Pumas: iban ganándole al América y, de pronto, no supieron cómo, pero terminaron perdiendo. Al Presidente le estaban saliendo las cosas muy bien, o al menos eso creían él, su equipo y la prensa extranjera, cuando de pronto apareció en escena la brutal violencia que padece la mayoría de los mexicanos, en la forma de 43 normalistas desaparecidos y, muy probablemente, masacrados. Por más que en el gobierno federal intentaron esconder la mugre bajo la alfombra, la podredumbre terminó estallándoles en las manos y manchándoles todita la cara. En este momento cuando Peña Nieto dice "Debemos estar unidos", yo creo que lo dice en serio. Es más: lo dice rogándole al cielo, porque ya comienza a darse cuenta que su Presidencia no es cuento de hadas, sino una auténtica historia de terror. El problema es que no se ve para dónde podrán hacerse Peña y sus muchachos. El Presidente y su equipo están como en shock, como cuando a un adolescente le dice su novia: "¿Qué crees? ¡Vamos a ser papás!".

Tú que eres poeta: El caso que me tiene desconcertado es el de Sandino Bucio, el poeta que fue arrestado por federales y luego liberado con un "usted disculpe". Se supone que lo capturaron porque había participado en los desmadres, perdón, desmanes de los anarquistas. Uy, se armó un escándalo: que si era una víctima de represión, que si lo habían levantado ilegalmente, que si lo querían desaparecer. Bueno, nomás no dijeron que se lo llevaron los aliens porque no hubo fotos de la nave espacial. Al final al muchacho lo soltaron y, en el colmo, suspendieron a los policías que lo arrestaron...

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