Cocina portuguesa : Tradición en el tiempo

AutorAngel Rivas

Innumerables platillos forman la cultura gastronómica portuguesa y una parte importante se elabora con los principales recursos del país: sardinas, bacalao, papas, aceite de oliva, quesos, embutidos y frutos secos.

Las botanas más tradicionales son los bolinhos, rissóis, chorizo crudo, quesos (que también se comen como postre) y la morcilla. Algunos de ellos se les llaman petiscos, similares a las tapas españolas y a otros salgados por sus rellenos salados.

"Los embutidos y el chorizo tienen un sabor especial porque la alimentación de los cerdos es con base en las castañas y estos se elaboran en casa, así se obtiene un producto distinto a otros países" afirma María da Silva, peopietaria y chef del restaurante Casa Portuguesa.

Por su parte, la aAorda es la sopa típica compuesta de un caldo con pan remojado y diversos ingredientes que varían según la provincia.

Además de los productos y platillos, las técnicas culinarias suelen ser tradicionales, al grado de que sino se sigue la manera antigua el sabor varía.

"Está el arroz pato del que reza la receta tradicional: corretear al pato vivo por unos minutos para que su sangre se ponga caliente, y de inmediato matarlo y cocinarlo con el arroz, para que éste agarre el sabor de la sangre tras la persecución. Una preparación que de no cumplir los requisitos, no se considera el original", recuerda Da Silva.

A pesar de que los hombres y mujeres adultos están ligados a estas usanzas y recetas, los jóvenes comienzan a inclinarse por las tendencias gastronómicas que provienen del exterior y poco a poco pierden el interés por la cocina tradicional.

Los tiempos de la comida, por lo contrario, están establecidos entre los portugueses y no han cambiado.

"El portugués desayuna ligero: un café exprés, pan tostado y turradas (pan con migajón y mantequilla), que se denomina pequenho almoAo (pequeño almuerzo).

Las comidas y cenas son fuertes, incluso hay regiones donde se acostumbra una merienda y más tarde una cena", comenta.

Gastronomía y Tradición

A lo largo de las tierras portuguesas se encuentra una cocina uniforme, aunque cada región y pueblo tiene su toque característico para preparar un platillo, por el simple gusto del comer.

"Cocinar es para los portugueses algo natural, sus fronteras comprenden tramos de costa que ponen la riqueza del mar, a su alcance.

"Es común ver los manjares dispuestos al centro de la mesa para degustarlos en un ambiente familiar. Por el buen apetito de los habitantes, la hora de la comida es un momento sagrado", comenta da Silva.

La única influencia externa que ha entrado es la árabe, pero aparece solamente en postres por el huevo y azúcar que llevan. Hay un poca influencia celta y española por la proximidad, pero con los demás países europeos no existe relación.

"A pesar de la adhesión a la Unión Europea no se ha logrado cambiar las costumbres culinarias, ni la esencia de los productos regionales...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR