Cobijado por San Nicolás, llega a 35 años de sacerdocio

AutorVicente Guerrero

El Padre Felipe Flores López no sabe exactamente cuándo le nació la idea de ser sacerdote, pero de lo que sí está seguro, al cumplir 35 años de ministerio, es que seguirá en la misma línea por la cual lo siguen miles de fieles de la Capilla de San Nicolás de Bari: ofrecer su vida para sembrar la fe.

El sacerdote regiomontano es actualmente uno de los presbíteros que ha despertado la devoción a San Nicolás de Bari, santo al que mucha gente le tiene fe por las gracias que otorga en peticiones especiales, en la iglesia de la Colonia Laderas del Mirador al sur de la ciudad.

La tarde del lunes no fue la excepción; y, de hecho, con mayor razón se cubrió de fieles y coches en las calles aledañas al templo al querer estar presentes en la celebración del Padre Felipe.

Más de mil 500 personas de diferentes partes del área metropolitana abarrotaron el templo y hasta tapizaron el atrio del lugar para participar de la misa de los lunes en que se pide especialmente a San Nicolás por trabajo o por un favor especial.

"Toda vida consagrada a Dios tiene sus altibajos, sus aplausos o sus llantos y es toda una amalgama de cosas; sin embargo, todo eso me ha llevado a tratar mucha gente e integrarme para llevar el Evangelio, y Dios me ha dado el don...

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