Claudia Ruiz Arriola / ¿Qué celebra el PRI?

AutorClaudia Ruiz Arriola

¿Quién iba a decir que el PRI llegaría a sus tres cuartos de siglo con amplios motivos para celebrar? Sin embargo, hemos de admitirlo: en México, el único partido político que ha logrado cabalmente sus metas es el PRI. Por eso merece una calurosa felicitación en su 75 aniversario. Nadie se alarme: ni me he sometido a una lobotomía sin anestesia, ni me he dejado contagiar voluntariamente por una vaca loca. Lo digo en serio y sin favoritismos, el PRI es el único partido que ha alcanzado cabalmente los objetivos de sus fundadores.

No sé ustedes, pero en el año tercero de la era foxiana, yo aún no diviso por ningún lado la virtuosísima y purísima Nueva Jerusalén de Gómez Morín y/o González Luna. Tampoco vislumbro la sociedad igualitaria y justa que Lázaro Cárdenas y Muñoz Ledo se comprometieron a construir al registrar a su partido (y recibir carretadas de lana) del IFE. Ni qué decir del edénico México publicitado por ese partido tan similar al ave de su emblema (puro pico). México ni es virtuoso, ni es justo, ni es ecologista como prometió la entonces Oposición al priismo (en ese caso, ¿con qué objeto mantenemos a tanto inútil?).

El único México que existe es el mismo de siempre: el México donde los "funcionarios de confianza" (¿de quién?) dispendian millones de pesos en vicios privados; donde maletines con billetes cambian de manos en pago de favorcitos o extorsiones; donde, al amparo de fueros, se lucra con permisos y patrimonios nacionales (nomás ahora en horario estelar y para todo público). Ese es el único México que existe y, tal como dijo Lord Madrazo en la fiesta de su partido, ese México lo construyó, sin ayuda de nadie, el Revolucionario Institucional.

Por eso el PRI celebra con ánimos. Con vigor. Con triunfalismo. Sabe que su estructura sigue intacta, su modus operandi también. ¿Qué importa quién esté en Los Pinos, o quién vaya a estar en el 2006? El PRI sabe que mientras nadie se faje los pantalones para desmontar la compleja red de complicidades, fueros, perdones mutuos y turbias negociaciones tejidas a lo largo de su mandato, él seguirá en el poder aún cuando ni siquiera esté en Los Pinos. A tres años de la alternancia, el PRI celebra porque ha frustrado la acción de la justicia contra los miembros de su partido que hicieron carrera y vocación del...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR