CIUDAD SALUD / Resistencia a antibióticos

AutorDr. Francisco Arroyo

Desde hace muchos años hemos oído que no debemos automedicarnos, pero esta sugerencia siempre entra por un oído y nos sale por el otro. Somos un pueblo que, ya sea por tradición, facilidad o necedad (aunque algunos dirían que por falta de dinero) lo primero que hacemos al enfermarnos es automedicarnos antes que ir al médico.

En el tema de los antibióticos tenemos que estos medicamentos fueron desarrollados de acuerdo a las bacterias que se han ido presentando a lo largo de la historia, es decir, son específicos para atacarlas, pero de alguna manera forman bacterias que se han ido adaptando y, en algunos casos, superándolos.

El motivo de que las bacterias estén ganando la batalla contra los antibióticos es que se ha hecho un uso indiscriminado de éstos y las bacterias aprender cómo irlos neutralizando y los antibióticos se han quedado atrás y no son tan eficaces como antes.

Este es un problema de salud pública ya que, por un lado, la resistencia está aumentando y, por el otro, hay un menor número de antibióticos que se producen y entran al mercado actualmente. Esto ocasiona que algunas de las infecciones que se presentan sean más difíciles de tratar y que también tarden, por lo tanto, más tiempo en curarse.

Por ejemplo, en un estudio hecho con antibióticos usados de forma primaria en infecciones pulmonares o urinarias, se vio que las bacterias desarrollaron una resistencia hacia éstos y que este efecto era mayor en el mes siguiente al haber tenido la infección y que pudiera persistir por más de 12 meses. Este mismo efecto propicia que se usen antibióticos de segunda generación, es decir, más complejos.

Hay, en general, una percepción de las...

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