La Ciudad y el Crimen / Robo a casa - habitación
| Autor | Rafael Ruiz Harrell |
En el DF se cometen dos tipos de delitos. No hay más. Desde que López Obrador impuso la moda y declaró que en ellos no había cifra negra, el procurador y el jefe de policía sólo se refieren a ellos. Los dos delitos en cuestión tienen, además, una gran virtud: siempre están bajando. No pasan dos semanas sin que Bernardo Bátiz o Joel Ortega nos hagan saber, en tonos triunfales, que los homicidios dolosos y los robos de vehículos están en su nivel más bajo en los últimos años. Así no lo declaren expresamente, sus comunicados permiten entender que logros tan destacados se deben a sus buenos oficios y a la eficacia con que dirigen las instituciones confiadas a su cuidado.
La verdad, sin embargo, es muy otra. Las cifras de homicidio doloso de la Procuraduría son tan poco confiables que sin duda hay en ellas cifra negra. Una muestra: considerando el total de asesinatos registrados en el DF de 2001 a 2004, resulta que las cifras del Sector Salud son 27.3 por ciento más altas que las de la Procuraduría -y en el resto del país ocurre exactamente a la inversa-, y las del Servicio Médico Forense del DF las superan en 38.3 por ciento. Por si no fuera bastante, sucede que los homicidios de mala fe están bajando en toda la República: del 2000 al 2005 disminuyeron en 12.4 por ciento. En el DF el descenso fue de sólo 1.6 por ciento. Se sabe, por último, que la acción de los organismos represivos apenas si afecta a los índices del homicidio intencional. Su descenso se debe a factores ajenos a las procuradurías y a las policías.
En relación al robo de vehículos sucede algo similar, sólo que en este caso el problema está en distinguir entre el verdadero robo de vehículo, o sea cuando se lo llevan para venderlo o desarmarlo y vender sus partes, y el llamado "secuestro" de vehículo, que ocurre cuando unos ladrones toman un auto para ir a cometer un robo o unos jóvenes lo usan para ir a una fiesta y luego lo abandonan en cualquier lado. Estos últimos son la mayoría. Hace unos años oscilaban entre el 65 y el 70 por ciento de todos los robos denunciados. Hoy están entre el 30 y el 40 por ciento y son los únicos que han bajado. Los robos auténticos de vehículos siguen más o menos igual. Nuestras autoridades no tienen ahí nada que presumir.
ROBO A CASA
A diferencia de los dos anteriores, hay un delito que sí permite juzgar la eficacia de las autoridades y precisar si están...
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