Celina Canales / México, ¿lindo y querido?
| Autor | Celina Canales |
Detectar una enfermedad a tiempo puede hacer la diferencia entre conservar la vista o quedarse ciego. Entre escuchar o perder la audición. Entre la vida y la muerte.
No obstante, la semana pasada se anunció que algunas pruebas para detectar enfermedades y condiciones en recién nacidos que habían sido declaradas obligatorias por el Gobierno federal en 2013 serán ahora canceladas por falta de recursos.
"Hay enfermedades que si las atiendes a tiempo no tienen ninguna secuela, pero si no, pueden tener efectos irreversibles", me dijo Vanessa María Esquino, médico cirujano y partero de la UANL.
En este septiembre, mes de la patria, muchos mexicanos soltaron el tradicional Grito como un murmullo apenas audible. Sin ganas y decepcionados.
Sólo aumentó la negación a celebrar la fecha patria el enterarnos que los padres de un bebé al que le toque -¿por desgracia?- nacer en suelo mexicano no sabrán si tiene una enfermedad congénita o heredada que requiera tratamiento inmediato hasta que quizás sea demasiado tarde.
A menos, por supuesto, que el recién nacido pertenezca al diminuto porcentaje de mexicanos que sí tienen acceso a la medicina privada.
Pero, ¿qué sucede con la gran mayoría, los alrededor de 6 mil 850 mexicanos que a diario llegan al mundo en los centros de salud públicos?
Supongamos que uno de esos pequeños nació hoy con hipotiroidismo congénito, suceso que de hecho es altamente probable dado que la incidencia de esta enfermedad en México es de uno por cada 4 mil nacidos.
Si al pequeño no le aplican la prueba de tamiz neonatal ampliada, la que están por recortar, los padres se llevan a su casa a un bebé que piensan que está completamente sano.
Sin embargo, la ausencia del tratamiento adecuado podría estarle causando a su bebé un daño neurológico grave e irreversible. Sin atención médica, la persona termina con una discapacidad intelectual.
"De lo más importante para diagnosticar a tiempo es el hipotiroidismo congénito porque es la causa número uno de discapacidad intelectual 100 por ciento prevenible", me dijo la doctora Esquino. "Cada día que pasa, literal cada día que pasa, hay una disminución del coeficiente intelectual".
Cuando a un bebé con este padecimiento se le realiza el tamiz metabólico durante las primeras 48 horas de vida, se le da tratamiento en los primeros 15 días de nacido, y se le da un seguimiento adecuado, la persona se desarrolla...
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