Celebran enfermos posada en reclusión

AutorDalila Sarabia

Una posada es sinónimo de alegría y celebración, aun cuando se realiza al interior del Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial (Cevarepsi).

La Navidad es un motivo para reunir a la familia, pero al menos la mitad de los habitantes de este lugar viven en permanente estado de abandono.

Familiares de los internopacientes tienen permitido visitarlos hasta cuatro veces por semana, lo cual pocas veces ocurre, pues algunos ni siquiera conocen el espacio de convivencia con mesas y sillas rojas.

Por ello, el director de centro, Jaime Abasolo y todo su equipo -custodios, enfermeras, terapeutas- cooperaron para celebrar una posada a todos los internopacientes que han sido marginados por sus familiares o que carecen de ellos.

Pollo frito, papas, chiles en vinagre, pastel y refresco fue el menú que disfrutaron alrededor de 140 hombres -de los 377- que están en este centro cumpliendo una medida de seguridad por haber cometido algún delito a causa de un brote psicótico.

"Es un día hermoso, todos están muy contentos ya quieren venir al convivio", aseguraba Abasolo mientras coordinaba los últimos detalles de la fiesta.

Perfectamente formaditos bajaron de sus dormitorios y se acomodaron de cuatro en cuatro en cada mesa donde la comida caliente ya los esperaba.

La emoción fue tal, que aún sin que todos los invitados tomaran sus lugares ya se escuchaba al fondo del salón: "señor director, ¿alcanzo otro platito?".

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