Celebra el 'shirotaÃsmo'
| Autor | Haydé Murakami |
Enviada
TOKIO, Japón.- Era una botellita de vidrio con apenas unos cinco tragos de leche fermentada, la cual contenía ingredientes poderosos, y que la hicieron atravesar con éxito 75 años en el mercado.
Se trataban de millones de bacterias carismáticas, capaces de abrirse paso vivas hasta el intestino y darle batalla a bacterias dañinas... y buena voluntad.
Y aunque eso de la buena voluntad suene a comercial ingenuo, acudir al centro de operaciones de Yakult, en Tokio, convence hasta al más necio.
No hace falta ni siquiera rascar mucho, hurgar en su centro de investigaciones, en la planta productora, o concentrarse suspicazmente en las presentaciones corporativas o sobre probióticos para encontrar pruebas de sus buenas intenciones, resulta más que suficiente.
Incluso, basta con estar atento a la emoción con la que algunos empleados de la empresa se refieren al Lactobacilo alrededor del cual gira todo su esfuerzo.
Vamos, ¡Supermán parece quedarse corto!
Tampoco es para menos. Ese bichito microscópico llamado formalmente Lactobacilo casei Shirota (LcS) entró brillantemente tanto a la historia de la ciencia, cuando el primer cultivo fue logrado por el doctor Minoru Shirota en 1931, como a la de la industria alimentaria, cuando se lanzó al mercado hace 75 años en Japón.
Se cuenta que muchos japoneses morían entonces por enfermedades gástricas prevenibles y, como la ciencia parece abrir sus secretos más generosamente a los movidos más por la intención de ayudar que por la ambición intelectual, el conmovido doctor Shirota, aún estudiante, encontró una respuesta.
La filosofía de Shirota, luego llamada "shirotaísmo", incluía buscar el camino de la prevención, cuidar la salud intestinal partiendo del supuesto de que eso lleva a una vida más larga, y desarrollar un producto costeable para cualquier ciudadano, entregado en mano junto con información útil.
Hoy se destapan todos los días 28 millones de pequeñas botellas en 32 países, que todavía contienen aquella primera mezcla: leche fermentada, bacterias heroicas y mucho mucho "shirotaísmo".
Repartidoras de salud
Sin importar si hay Sol, lluvia o nieve, las famosas "Damas Yakult" (Yakult Ladies) llegan puntuales cada día a las casas de los consumidores tokiotas.
Por supuesto que allá, como en México, existe la posibilidad de comprar los productos en el supermercado; por las calles incluso se pueden encontrar máquinas expendedoras de productos Yakult. Entonces, como diría el filósofo de Juárez: ¿pero...
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