Cautivan zapatistas a italianos

AutorEsteban Israel

MURAL / Italia

ROMA.- La simpatía del Inter de Milán por el Subcomandante Marcos no es un caso aislado en Italia, ya que 11 años después del alzamiento continúa siendo el principal bastión zapatista de Europa.

Aunque ya no organizan manifestaciones de 50 mil personas como las de finales de los 90, los italianos continúan idolatrando a Marcos y peregrinando con fervor religioso a la Selva Lacandona en Chiapas.

La simpatía por los zapatistas es un fenómeno transversal que va desde el influyente presidente del Inter, Massimo Moratti, hasta el líder del movimiento antiglobalización Disobbedienti-Tute Bianche (Desobediencia-Monos Blancos), Luca Casarini.

Los italianos fueron los primeros en aterrizar en Chiapas tras el alzamiento de enero de 1994 y los últimos en irse.

Medio centenar de universitarios milaneses pagan anualmente alrededor de 2 mil dólares por un "full immersion" de 20 días en la realidad zapatista, que incluye conferencias, noches a cielo abierto y días aprendiendo a amasar tortillas.

Por eso la invitación de Marcos a un partido amistoso entre la selección del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el Inter, uno de los clubes de fútbol más ricos del planeta, fue bien recibida por la opinión pública italiana.

Seducidos por Marcos

Las raíces del zapatismo italiano hay que buscarlas en Marcos.

"Marcos supo entrar de lleno en el imaginario colectivo de los italianos", dijo a MURAL el periodista Gianni Minê, autor de los documentales "El retorno de Zapata" e "Imágenes de Chiapas" presentados en 1996 en el Festival de Cine de Venecia.

"Buena parte de los italianos todavía sueña con cambiar el mundo y hace 10 años encontraron en los zapatistas un importante punto de referencia", explicó.

El interés por los indígenas chiapanecos no conoce barreras políticas.

Doscientos setenta y cinco parlamentarios de todos los partidos desde Rifondazione Comunista hasta el conservador Forza Italia del Premier Silvio Berlusconi o el posfascista Alleanza Nazionale- firmaron en noviembre del 2002 una carta pidiéndole al entonces Presidente Ernesto Zedillo que reanudara el proceso de paz y respetara los Acuerdos de San Andrés.

Cuentan que tras el asesinato de 45 indígenas tzotziles en la comunidad de Acteal, en diciembre de 1997, el Premier Romano Prodi pensó no ratificar el tratado comercial firmado por México con la Unión Europea.

Sintonía antiglobalización

Pero la conexión más fuerte y duradera no fue con la izquierda institucional, sino con...

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