Mario Castillejos / Más allá de abucheos

AutorMario Castillejos

Los jugadores del Monterrey se resisten a comprender que ya no son una aristocracia con privilegios y sin deberes, sino un instrumento potencial con ineludibles responsabilidades.

Al finalizar el partido contra Jaguares, quiero suponer que más de uno despotricó en el vestuario por los abucheos con los que fueron despedidos. De hecho, al calor de este veredicto, Jonathan Orozco publicó en su twitter: "hay gente que no sabe ni pu... madre de futbol".

En legítima defensa, el plantel del Monterrey tiene ganado los siguientes argumentos: uno: aún es el único equipo invicto de la Liga.

Dos: están en el tercer lugar general. Tres: sólo han perdido un partido del campeonato regular durante todo el 2010. Y cuatro: también van invictos en la Concachampions.

El precio de tener un equipo basto en posibilidades, que ya fue campeón, y que sin Suazo y Aldo de Nigris terminó en el primer lugar general, hoy hacen que las expectativas hasta del más benévolo de sus seguidores sean mucho más ambiciosas.

¿Tiene razón Orozco cuando afirma que la gente no sabe de futbol? No, porque de entrada, los Jaguares no hicieron nada extraordinario para nulificar al equipo de Vucetich. Y aunque el 11 titular Rayado no contó -por el motivo que usted quiera- con Ayoví, Neri Cardozo y un lateral izquierdo nominal, a este súper plantel no se le puede aceptar un insípido empatito frente al penúltimo lugar del campeonato mexicano.

Si el pase es la esencia del futbol y los buenos pasadores sirven para ordenar tácticamente a cualquier equipo, en medio de una crisis, lo único que debe hacer...

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