Sobreviven carteros a la e-modernidad: Temen en Hidalgo vocear a difuntos

AutorJavier Peralta

Pachuca.- José Hipólito Saucedo es cartero desde hace 15 años, oficio que desempeña desde que un día su hermano lo convenció para que ingresara al servicio postal. A partir de esa vez, no ha dejado una sola quincena sin levantarse diario a repartir la correspondencia.

Recuerda con tristeza las veces que ha llegado a un domicilio a entregar el corte de las tarjetas de crédito, la revista Selecciones a un señor por el que pregunta y nada más ve los ojos de quien le abre llenarse de lágrimas para enterarse que el destinatario ya murió.

"Eso de andar voceando difuntos es lo que más nos duele, pero uno cómo puede saber que el señor o la señora ya se fueron y nunca van a regresar, y que los únicos que se quedaron fueron sus parientes", cita.

Polo recuerda una ocasión en que fue arrollado: "No sé ni cómo lo cuento, pero muchos que vieron el accidente pensaron que o quedaba muerto o paralítico, pero ni lo uno ni lo otro", anota.

Para Polo, todo se debe a que existe la leyenda de que por cada morral de cartas que le toca repartir, siempre hay una sin destinatario...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR