Cartas a El Norte / Familiares candidatos

Sr. Director:

En relación a las aspiraciones a puestos de elección popular de las esposas de algunos gobernantes en el País, todo ciudadano tiene derecho a votar y ser votado, así lo consagra la Constitución. Aspirar a una Gubernatura, Alcaldía o cualquier otro puesto es tan legítimo para las consortes de los funcionarios como para cualquiera de nosotros que cumpla con los requisitos.

El problema no es el fondo, sino la forma en la que lo quieren llevar a cabo, pues desde la plataforma gubernamental, las primeras damas estarían tentadas al desvío de recursos humanos y monetarios para sus campañas, amén del apoyo incondicional del aparato burocrático a sus candidaturas.

La democracia tiene sus riesgos, éste es uno de ellos, sin embargo, no podemos olvidar que la última palabra la tiene el electorado mediante el ejercicio del voto; se podrán postular esposas, hijos o cualquier otro familiar de un gobernante, pero el poder de decisión lo tenemos nosotros.

Marco Antonio Sáenz R.

San Pedro Garza García, N.L.

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