Juan Carlos Ortega asume rol de técnico y “padre” en Chivas

GUADALAJARA, Jal., octubre 21 (EL UNIVERSAL).- La crisis ha llevado al Rebaño hasta el sótano de la clasificación. Es el peor equipo de la Liga MX. Los números son fríos. Pero en plena catástrofe, el técnico de Chivas, Juan Carlos Ortega, asume un rol inesperado. No es sólo técnico. Hoy, también adopta el comportamiento de un padre.

Protege a los futbolistas rojiblancos como hijos. No le importa que al hacerlo, termine exponiendo su propia cabeza o que caiga en contradicciones dentro de su propio discurso. Todo con tal de evitar señalamientos sobre los que se constituyen en el terreno de juego como los principales responsables del pésimo andar del Guadalajara.

Ante el cuestionamiento, viene la duda. Su respuesta es titubeante de inicio. Pero al final, aunque lo niega, termina inmerso en ese papel de "padre-entrenador" que impide al equipo señalar abiertamente sus propias fallas.

- Ha sido paciente y hasta paternalista con el plantel, pero la crisis inevitablemente llevará a tiempo de decisiones rudas.¿Piensa proteger a este plantel, aun a costa de que se exponga a que ruede su cabeza o prefiere que rueden otras? ¿Llegado el punto, su cabeza o la de ellos?

- Eso no es tan... Mi cabeza a la única que le pertenece es a mi esposa y a mis hijos. No, no. Me preocuparía el día que yo tenga... No, no. Miren, el futbol tiene algo en la dinámica de grupos, el vínculo que debe existir entre cuerpo técnico y jugadores se tiene que dar en doble dirección. Conseguirla no es tan fácil, es muy difícil.

Su explicación es larga. De ninguna manera quiere pensar en la posibilidad de cortar cabezas ajenas antes de exponer la propia. Se tienta el corazón. "Ese vínculo no es tan fácil construirlo, pero es bien importante hacerlo y tener en la mente que, con sinceridad, a los grupos se les protege", admite.

"A los grupos se les brindan herramientas para que puedan ser mejores futbolistas. Pero para que eso suceda, debe haber un vínculo entre técnico y jugadores. No es que tú en algún momento sopeses... No es que se ponga mi cabeza o la cabeza de ellos. No, no", añade el estratega rojiblanco.

"No soy paternalista, ni mucho menos. Simplemente hablo de que para que los vínculos existan y los compromisos estén vigentes, debemos siempre ver lo mejor que dirigimos. No debo estar viendo, debo estar solucionando lo que no estamos haciendo bien. Pero así tan drástico que la cabeza del jugador (esté en juego), no", complementa Ortega.

Y en esa unidad, como si se tratara de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR