Carlos Fuentes, un autor universal

AutorJuan Ramón de la Fuente

Entre las grandes figuras egresadas de la Universidad Nacional Autónoma de México, destaca Carlos Fuentes. Su trayectoria encarna muchos de los más altos ideales de cuanto significa ser universitario, y las mejores características de lo que implica el ser intelectual. Puede afirmarse con justeza que Carlos Fuentes es el más universal de los escritores mexicanos vivos, lo que no se debe únicamente a su vasta obra literaria, de amplios y variados registros, sino también a la naturaleza de su curiosidad intelectual y de sus preocupaciones sociales.

La persistencia en algunos de sus temas contrasta con la diversidad de sus experiencias y aventuras verbales. Lo mismo escribe novela, ensayo, cuento y guión de cine, que críticas de arte, artículos periodísticos, escritos memoriosos y obras de teatro, que lo han convertido en uno de los creadores mexicanos de mayor prestigio en el mundo, traducido a las principales lenguas del orbe.

La convicción universal de Carlos Fuentes se remonta a su formación como hombre comprometido con su tiempo, resultado de un rico cúmulo de experiencias iniciadas desde muy temprana edad. Su padre, don Rafael Fuentes Boettiger, diplomático de amplia carrera, se hizo acompañar por su hijo durante sus misiones en Estados Unidos, Chile y Argentina, de tal manera que Fuentes recibió una educación inicial diversa y estimulante en instituciones de Washington, Santiago y Buenos Aires.

A mediados de los años cuarenta, la familia Fuentes se estableció en México, y Carlos realizó sus estudios secundarios en escuelas de la clase media mexicana, donde ganaba todos los premios de ensayo literario y poesía, usando seudónimos ante el asombro de maestros y condiscípulos. Continuó sus estudios en la Escuela de Jurisprudencia de la UNAM, cuya efervescencia académica e intelectual le resultó especialmente atractiva. Allí se integró a la que sería conocida como la "Generación de Medio Siglo", y fundó con otros jóvenes universitarios una revista precisamente con ese nombre.

En esos primeros años de la década de los cincuenta, Fuentes inició sus colaboraciones en la revista Universidad de México, al tiempo que empezó una amplia y fructífera carrera diplomática, y publicó su primer libro de cuentos, Los días enmascarados, en la colección Los Presentes, que dirigía Juan José Arreola, singular impulsor de iniciativas culturales.

Así Carlos Fuentes, formado y forjado en la UNAM, desarrolló su vocación humanística mediante una gran actividad...

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