Carlos Elizondo Mayer-Serra / Tirar el dinero
| Autor | Carlos Elizondo Mayer-Serra |
En 1997 el IFE organizó la primera elección que se llevaría a cabo para jefe de Gobierno de la Ciudad de México, además de la elección federal de diputados y senadores. Yo era uno de los seis consejeros ciudadanos. No éramos funcionarios del IFE, como los consejeros nacionales. Sólo estábamos activos durante el proceso electoral, en reuniones semanales, encargados de supervisar el buen funcionamiento del proceso. Las elecciones no tuvieron mayor sobresalto. Cuauhtémoc Cárdenas fue electo jefe de Gobierno. El PRI perdió por primera vez la mayoría en la Cámara de Diputados.
Tres años después me tocó nuevamente supervisar la elección del 2000. Sólo la elección federal. El Distrito Federal había construido su propia burocracia, el Instituto Electoral del Distrito Federal. El mayor problema fue coordinarnos con el nuevo Instituto. Las dos instituciones, la federal y la local, tenían que hacer lo mismo. El ciudadano se enfrenta a este absurdo en cada elección concurrente. Hay que hacer dos colas ante dos mesas llenas de ciudadanos y representantes de partidos políticos.
Desde el año 2001 (no se encontraron datos más antiguos) el IEDF ha costado 13 mil millones de pesos. Es poco más del 21 por ciento de la deuda vigente del Distrito Federal al primer trimestre del 2013. Equivale a poco más de la mitad del costo de la línea 12 de metro. ¿No es tirar el dinero gastar en una institución que duplica el trabajo de otra?
Si sumamos el costo anual de todos los institutos locales, según la Asociación de Institutos Electorales Locales, alcanzan los 7 mil 400 millones de pesos, de los cuales 4 mil 700 millones son para la operación del sistema y el resto es para los partidos políticos. No se suman acá los recursos de los tribunales electorales locales. Durante este sexenio gastaremos 44 mil 400 millones. Sólo de gastos de operación serán 28 mil 200 millones, suficiente como para construir 6 243 escuelas como la recientemente edificada en Nuevo Jerusalén, Michoacán.
Es normal que estos institutos defiendan con vigor su papel, entre otras razones porque pagan bien. El presidente del IEDF gana por concepto de sueldo 121 mil pesos mensuales. Más que el jefe de Gobierno de la Ciudad de México. Hay pocas excepciones austeras, como en la Comisión Estatal Electoral de Nuevo León cuyo presidente gana 18 768 pesos. Además, muchas veces los funcionarios de las instituciones electorales locales también reciben bonos...
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