Carlos Bravo Regidor / Vacunado

AutorCarlos Bravo Regidor

El Presidente asegura que todos los días lo "atacan", que los medios están en una campaña permanente para "golpearlo". Incluso ha difundido listas con los nombres de quienes publicamos opiniones "en contra" suya. También sostiene que sus opositores están "moralmente derrotados", que se les nota la desesperación por "recuperar sus antiguos privilegios". Porque "quieren seguir robando", "su dios verdadero es el dinero", "son muy corruptos", "su doctrina es la hipocresía", etcétera. Todo eso lo dice, según sus propias palabras, en ejercicio de su "libertad de expresión", porque su "pecho no es bodega" y tiene "derecho" a "defenderse".

No importa que la labor de la prensa sea hacer el escrutinio cotidiano de la vida pública, ni que el periodismo consista en dar a conocer información que quienes están en el poder preferirían que no se supiera. Si la cobertura lo desfavorece es mala y está mal. No importa la especificidad de lo publicado: la veracidad de los datos, el rigor de los argumentos o la inteligencia de la crítica. Si no sirve para apuntalar su narrativa, no tiene ningún valor. Y tampoco importa el hecho de que sus adversarios hayan votado a favor de varias de sus iniciativas en el Congreso, ni que algunos gobernadores de oposición hayan procurado establecer una relación colaborativa, de trabajo y buena fe, con su gobierno.

Da igual. El Presidente no pondera, no modula, no distingue. Cualquier desacuerdo le resulta sospechoso, mezquino; a cualquier comentario que no sea un elogio reacciona como si se tratara de una agresión en potencia. Por eso tiende tanto a las generalizaciones, siempre falaces e injustas pero eficaces, porque le permiten pintarlo todo con la brocha gorda del recelo y el escarnio. Nada de eso, sin embargo, parece estarle generando grandes contratiempos. Sus mayorías en el Congreso lo apoyan, su aprobación es alta, las proyecciones sobre la intención de voto por su coalición en las próximas elecciones lucen muy prometedoras (https://bit.ly/3pQZN2e).

Los medios, la crítica y las oposiciones no están funcionando como se supone que deberían funcionar; es decir, como factores que orientan la formación de opinión pública e influyen en...

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