'Me cargué las pilas y gracias al tiro con arco me rehabilité'

ZACATECAS, Zac., octubre 19 (EL UNIVERSAL).- Lejos de que el cáncer de mama que le afectó 18 ganglios deprimiera a María de la Paz Acosta Herrera, la mantuvo activa: primero buscó cómo vencerlo y, después, cómo rehabilitarse con el tiro con arco.

Para compartir su experiencia formó el primer club de arqueras en México y escribió un libro sobre cómo enfrentar la enfermedad.

En 2018, María de la Paz, quien actualmente tiene 45 años, intuía que algo en sus senos no estaba bien, por lo que decidió realizarse una mastografía. Los resultados confirmaron que tenía cáncer; estaba en la etapa tres y dos ganglios tenían metástasis.

Después de una intervención quirúrgica y seis meses de quimioterapias, perdió sensibilidad y movimiento en brazos y espalda. "Me cargué las pilas y comencé a practicar yoga, además de buscar información para rehabilitar a mujeres tras la cirugía", cuenta.

En febrero de este año se encontró con Sergio Tirado, un amigo suyo que es entrenador de tiro del grupo Arqueros de Plata, quien le planteó practicar el deporte como rehabilitación, ya que él había visto un proyecto similar en España.

Ella aceptó, acudió al campo de los arqueros y asegura que desde ese día quedó enamorada de la disciplina, porque vio que además de que le disminuye el estrés, logró una movilidad total y mayor sensibilidad: "No sé si tuvo que ver la vibración de las cuerdas cada que suelto las flechas, pero ha sido maravillosa mi recuperación"...

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