Carga El Pípila una losa, pero de chicles

AutorLuis Alegre

EL NORTE / México

GUANAJUATO.– La historia de México dice que en 1810, El Pípila cargó una losa de piedra en su espalda... pero casi dos siglos después su carga es de chicles multicolores.

El monumento al personaje que emergió de la gesta independentista es una visita obligada para quienes van a Guanajuato y, aparentemente, para quienes deseen deshacerse de su goma de mascar.

La mole de concreto y placas de cantera rosa, obra del escultor Juan F. Olaguíbel, fue construida en 1939 y montada en 1940 en lo alto de un cerro, desde donde se puede ver toda la ciudad.

En la parte posterior de la estatua está el acceso a un mirador, que aprovechan los visitantes para dejar su “recuerdo” en la espalda del gigante.

Las autoridades afirman que cada dos o tres meses llaman a los empleados de limpia para retirar los miles de chicles de todos colores y sabores.

Es un cuento de nunca acabar, resume el guardia del...

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