¡Fueron 52, carajo!

(Embargada para sitios en internet hasta las 24:00 horas locales)Ricardo Raphael(Analista polírico)EL UNIVERSALVicente Fox convoca a pactar una tregua con los criminales. Propone una ley de amnistía y "regularizar" las drogas. (Por fortuna ya no es presidente). Felipe Calderón reclama a sus adversarios políticos: según él, la situación del país se debe a la mezquindad de los partidos. Rodrigo Medina, gobernador de Nuevo León, dice que no es momento de buscar responsables. Fernando Larrazábal, alcalde de Monterrey, culpa a la Secretaría de Gobernación. La PGR sospecha que pudo haber habido complicidad de policías municipales. La empresa que administraba el Casino Royale, en voz de su abogado, aclara que los dueños también son víctimas y que por tanto no pagarán indemnización a los deudos.¡Fueron 52, carajo, y la infamia moral es la actitud que prevalece! Señalar al de enfrente con tal de zafarse es lo único para lo que hay destreza. Que a las víctimas y sus familiares se los lleve de nuevo el infierno. La justicia no es para ellos sino para quien tiene el micrófono. ¿Quiénes fueron los sujetos que a las 15:48 del jueves descendieron de tres vehículos y vaciaron gasolina frente a la puerta principal de ese centro de juego?El presidente Calderón los ha llamado terroristas pero a diferencia de los que sí lo son, éstos no dejaron una nota, ni enviaron un comunicado, ni se adjudicaron la tragedia.Tampoco iban encapuchados; asunto que no es menor. Quien va a asesinar a media centena de seres humanos y no se cubre el rostro, o está loco o bien tenía previsto originalmente hacer otra cosa.Según los testimonios que la prensa ha ido recogiendo entre sobrevivientes, antes de encender el fuego los criminales advirtieron que aquello no iba dirigido hacia los clientes, sino que era contra los dueños. Trascendió que esta ocasión no fue la primera en que el Casino Royale tuvo una visita tan siniestra. Al parecer, hace seis meses otro grupo armado acudió pero los empleados de seguridad cerraron todas las puertas de emergencia para que los mafiosos no entraran. ¿Qué querían los criminales aquella vez? ¿Por qué regresaron el pasado jueves?Una hipótesis es que en ambos casos se buscaba amenazar a los dueños por no pagar la cuota que en estos tiempos las organizaciones ilegales exigen a los establecimientos. Otra, que se trató de un escarmiento porque el Casino lava dinero para la banda criminal opuesta. En cualquiera de los dos casos, los...

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