De cara al sol
| Autor | MarÃa Fernanda Torres |
Después de que expones tu rostro diariamente al sol y a los contaminantes ambientales, necesitas consentirlo con tratamientos que le devuelvan su tersura y suavidad.
Los faciales son una excelente alternativa para nutrir y activar la circulación de tu piel, más cuando se combinan con productos que, además de mantener la elasticidad y firmeza del cutis, brindan interesantes opciones ante ciertos problemas dermatológicos.
Las mascarillas son un complemento ideal para conservar una piel sana y resaltar sus características naturales, expresa Héctor Leal Silva, director del Centro de Dermatología y Cirugía Cosmética, de Monterrey, Nuevo León.
"Se usan para mantener la piel limpia, hidratada y protegida; también coadyuvan mucho en tratamientos dermatológicos", menciona el experto.
Todos los tratamientos faciales inician con una limpieza profunda para remover las impurezas de la piel y el exceso de grasa, mediante la aplicación de un tónico o astringente. El siguiente paso es un masaje relajante que permite balancear la energía de la piel a través de movimientos rotativos ascendentes, explica.
También se aplican masajes de drenaje linfático para descongestionar los líquidos que se acumulan debajo de la piel, especialmente en aquellos pacientes con algún tipo de inflamación en el rostro. Posteriormente se aplica una mascarilla dependiendo del tipo de piel, normal, seca, grasa, mixta o sensible.
Algunos faciales utilizan vapor para abrir los poros y extraer las impurezas con mayor facilidad, mientras que otros hacen uso de parches para impregnar la piel de sustancias a base de extractos de hierbas, agrega Leal.
Por último, se aplica algún tonificante o protector solar para refrescar y cuidar la piel.
Generalmente, el efecto de los faciales dura entre dos y tres semanas, indica Leal. La frecuencia del tratamiento dependerá del padecimiento y de los resultados que se deseen obtener.
Para mantener una piel sana y en buenas condiciones se recomienda aplicar un facial de limpieza profunda cada mes; para conservarla humectada se sugiere un tratamiento hidratante cada 15 días, y para eliminar líneas de expresión, poros abiertos y cicatrices, un facial purificante que combine la microdermabrasión, cada una o dos semanas.
A tu favor
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