CAPITANES
JUAN CARLOS PARDO BEJARANO...
Se firmó el 3 de febrero el Tratado de Asociación Transpacífico, y el capitán de la Cámara Nacional de Industriales de la Leche debe cuidar a una de las industria más sensibles. Vigilará los cupos arancelarios previstos hasta por 11 años para leche, crema, mantequillas y quesos.
Tijera de Acero
Quien tuvo que meter una mayor tijera a su personal fue Alonso Ancira, cabeza de Altos Hornos de México (AHMSA).
A principios de año, el capitán de una de las acereras más importantes del País, previó un recorte de 600 personas en sus operaciones en Coahuila, Chihuahua y Durango, para contrarrestar los bajos precios del acero a nivel global.
Nos dicen que al último, las cuentas fallaron a quienes accionaron la tijera y la estrategia de ahorro y compactación de su estructura operativa llevó a un recorte de 750 puestos. Recuerde que en junio de 2015 cerraron 4 mil 500 empleos.
Apenas en octubre pasado la Secretaría de Economía, que encabeza Ildefonso Guajardo, fijó un arancel semestral del 15 por ciento sobre planchón, placa, lámina rolada en frío, lámina rolada en caliente y alambrón para frenar la competencia extranjera desleal.
Sin embargo, la medida impuesta por Economía padece un anacronismo con la celeridad que funden los hornos siderúrgicos, principalmente de China.
Por ello se anticipa que una de las peticiones que los capitanes siderúrgicos promoverán ante Economía es la prórroga, sí, de al menos seis meses más del arancel generalizado. Encarrerados, planean pedir que se aplique a otros productos sensibles como la varilla.
La fecha límite será en marzo. Habrá que ver si Economía da su brazo a torcer.
Sale Nobel
Este año, el Consejo de Administración de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que dirige Enrique Ochoa, arranca con un hueco que llenar.
En su última sesión, del pasado 10 de diciembre de 2015, Ochoa recibió la carta de renuncia del consejero independiente y Premio Nobel de Química, Mario Molina Pasquel.
Parece ser que el también presidente del Centro Mario Molina prefirió dimitir a su cargo dentro de la CFE por conflicto de intereses, y por sus sucesivas inasistencias a las sesiones del consejo. Sus integrantes deben atender al menos el 75 por ciento de las reuniones al año.
Y es que además de una apretada agenda, Molina tenía una posición complicada dentro del Consejo porque existe dentro de su cartera de futuros proyectos la posibilidad de que el Centro que él preside asesore a la CFE en materia...
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