CAPITANES

JACOBO STERN

El capitán de Lenovo en México está celebrando los 10 años del fabricante chino de computadoras en el País. Trae buenos resultados: ocupa el segundo lugar en ventas y en el último año colocó 24.7 por ciento más dispositivos. Ahora busca incursionar en el segmento de teléfonos celulares.

Sacan Chispas

Si ve por ahí a Víctor Fuentes del Villar, capitán del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM), no le vaya a mencionar el tema de capacitación de los trabajadores de CFE, pues el tema lo pone de malas.

Resulta que Fuentes Del Villar está más que enojado porque la empresa que dirige Enrique Ochoa está capacitando a sus empleados a través de un programa llamado Agentes de Transformación CFE-SUTERM.

Nos dicen que el dirigente está molesto porque señala que a través de terceros se están preparando a los trabajadores bajo argumentos "arbitrarios y sesgados" que desprecian las áreas internas de capacitación.

Es más, está convencido que esto demuestra dos cosas: que los directivos de CFE no confían en los trabajadores, y la existencia de intereses oscuros asociados al contratismo.

No olvide que la 'buena' relación entre ambos está por ponerse a prueba, cuando la CFE entre en su fase más álgida de transformación que implica dividirse en pequeñas unidades de negocio (Generación, Distribución y Comercialización) y éstas, a su vez, hacerse más pequeñas, para cumplir con el mandato de la reforma energética.

Esto implica, forzosamente, una cooperación con los trabajadores para que el cambio arranque en 2016.

¿Será posible?

Atínele al PIB

Luego que la Secretaría de Hacienda, a cargo de Luis Videgaray mantuvo sin cambio su expectativa de crecimiento económico para 2015 en el rango de 2 a 2.8 por ciento, la pregunta no se hizo esperar: ¿le atinarán ahora sí al pronóstico?.

No es para menos, porque para Hacienda no ha sido nada fácil esto de calcular el crecimiento.

Recuerde que en enero de 2013, salieron a decir que ese año creceríamos 3.5 por ciento. Pronóstico que modificaron cuatro veces a la baja. En el último de sus intentos, dijeron que sería 1.3 por ciento, por abajo del dato oficial que resultó 1.4 por ciento.

En 2014 no les fue mejor. Iniciaron con 3.9 por ciento de expectativa. Lo redujeron en mayo y nuevamente en noviembre, cuando de plano decidió mejor expresar su pronóstico en un rango entre 2.1 y 2.6 por ciento. Le atinaron a la tasa oficial que fue de 2.1 por ciento.

Ha sido tan complicado...

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