El camino del spam
| Autor | Alan Valdez |
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Enciendes tu computadora, abres tu cuenta de correo y, entre los mensajes de la oficina y las cartas de amigos y conocidos, te encuentras dos o tres piezas de "spam", esa publicidad poco deseada y mal redactada que te ofrece lo imposible o lo fraudulento.
¿Cómo llegaron esas cartas a tu buzón? ¿Quién las envía, y por qué siguen llegando si nunca les compras?
Para que el spam llegue a tu buzón se necesita generalmente la participación de tres malhechores. El primero es el vendedor de "Rolexxx" , de medicinas herbales y de productos medio indecentes. Como hay muy pocas personas interesadas, el vendedor se da cuenta de que necesita hacerle llegar la publicidad a miles de personas, si no es que a millones, con tal de lograr un par de ventas.
Imprimir un millón de volantes es carísimo. Llamarle por teléfono a un millón de personas también, pero enviar un millón de correos no le cuesta casi nada al spammer. Todo lo que necesita es un millón de direcciones.
Aquí es donde entra el segundo malhechor de la historia: el ingeniero social. Este especialista en manipular a las personas para obtener su información secreta tiene docenas de trucos para apoderarse de las direcciones electrónicas de millones de incautos.
Por ejemplo, este "ingeniero" puede crear una página en la que ofrece enviarte un chiste diario, una chica en bikini, o las últimas noticias del futbol. Tal vez cumplirá y te enviará fotos de chicas guapísimas... pero también venderá tu dirección a los spammers.
Las cartas cadena son otra herramienta en el arsenal de este personaje: envía una carta contándote sobre la terrible maldición que te caerá si no le reenvías la carta a 10 amigos, y para cuando la carta vuelve a caer en sus manos ya tiene las direcciones de 10 amigos tuyos y de 10 amigos de cada amigo y etc... todas ellas listas para ser vendidas al mejor postor.
El vendedor ya tiene un producto y ya tiene una lista de un millón de personas a las que quiere vendérselo. Se sienta en la computadora, envía los primeros 100 mil... y se entera de que su proveedor de servicios de internet acaba de bloquear su cuenta, porque están llegando demasiadas quejas de personas que no quieren basura en su buzón. ¿Qué hará ahora el vendedor para escribirle a las otras 900 mil personas? Contratar a un hacker.
Para los spammers cada vez es más difícil enviar su basura desde su propia...
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